Público
Público

Caja Madrid baja a la mitad su aportación a la obra social

Rato cobra al menos 1,2 millones de euros al año por presidir la entidad

V. Z.

Los descensos de los beneficios de las cajas están teniendo un efecto en la obra social, que se alimenta año a año de esos resultados, aunque por ahora estas entidades logran mantener prácticamente las mismas actividades gracias a los fondos que habían acumulado para este fin en los años boyantes de la economía.

Caja Madrid es un claro ejemplo de lo que está ocurriendo. Como entidad individual, que es la que a partir de ahora va a dotar la obra social, el año pasado redujo sus ganancias a la mitad (de 360 a 180 millones de euros) y ha bajado en idéntica proporción el dinero que va a dedicar a sus actividades sociales. Los 80 millones que dedicó el ejercicio pasado a estos fines quedarán en 40 millones en 2011, en ambos casos correspondientes al 22% de los resultados.

No obstante, la obra social que finalmente se va a ejecutar será, según la caja, 130 millones, prácticamente igual que los 130,9 millones dedicados el ejercicio pasado (de ese dinero, 27,5 millones fueron a través de la fundación). Del total presupuestado, 40 millones procederán de los beneficios, otros 40 millones saldrán de un fondo que ha ido dotando la entidad durante años y los 50 millones restantes vendrán de los ingresos que prevén conseguir con las propias actividades, tanto en venta de entradas como en subvenciones o conciertos firmados con las administraciones públicas.

Por otra parte, Rodrigo Rato habrá ganado, al menos, 1,2 millones en su primer año como presidente de Caja Madrid. Según el informe anual de la caja, hecho público ayer, los diez primeros ejecutivos de la entidad se embolsaron 11,746 millones de euros en concepto de sueldo y otras remuneraciones análogas, lo que supone una media de 1,17 millones por directivo, a los que Rato suma 81.000 euros recibidos en calidad de consejero.

Miguel Blesa, expresidente de la caja, percibió algo más de 16.000 euros por apenas 28 días como representante en el consejo y la comisión ejecutiva durante 2010. Gerardo Díaz Ferrán, expresidente de la CEOE, recibió 1.350 euros, convirtiéndose en el consejero con menor retribución en 2010. En el lado opuesto figuran José Antonio Moral Santín, de Izquierda Unida, y el independiente Guillermo Marcos, que ganaron 141.920 euros, cada uno.

Caja Madrid hizo públicos los sueldos de sus consejeros el mismo día que el Congreso avaló que se limiten los bonus de los directivos de las entidades cuando sean incoherentes con el mantenimiento de una base sólida de capital, idea que aparece en el nuevo decreto sobre solvencia del sector financiero.

Por otra parte, la UE inicia inició ayer un proceso de consultas sobre un futuro impuesto al sector financiero, informa Daniel Basteiro.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias