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Una caminata al tibio sol de otoño

Una sencilla ruta para descubrir los encantos otoñales del Parque Nacional de Cabañeros.

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Disfrutar de la increíble paleta de tonos y colores que nos ofrece el otoño y adentrarse en los encantos de la naturaleza virgen de la ribera del río Bullaque, que recorre parte del Parque Nacional de Cabañeros, es una delicia que nos brinda el recorrido del sendero que parte de la presa de Torre de Abraham.

El itinerario interpretativo de Torre de Abraham, de apenas una hora de recorrido, está jalonado con paneles que nos ayudan a conocer mejor la riqueza natural del entorno. Así, podemos reconocer los madroños, labiérnagos, fresnos, alisos, juncos, sauces, chopos, sarga, lentiscos, cornicabras, aneas o tomillos que van saliendo a nuestro paso.

Unas temperaturas más benignas, y la bendición de las primeras lluvias, hacen de Torre de Abraham un lugar donde poder apreciar el bosque de galería en toda su belleza.

El sendero interpretativo botánico se realiza sobre unas pasarelas elevadas que cruzan de un lado a otro el cauce del río Bullaque, adentrando al visitante en la frondosa y cambiante vegetación. La ruta, accesible para personas con movilidad reducida, cuenta con paneles explicativos de cada planta y árbol, que resultan utilísimos para el viajero que decide recorrerlo de forma autoguiada.

Aprovechar estos días del otoño y disfrutar del tibio sol que se cuela entre las ramas de los árboles del bosque resulta magnífico. Podemos compartirlo con multitud de pequeñas aves, como el carbonero común, el abejaruco común, el trepador azul, la lavandera cascadeña, el avión común o la oropéndola, entre otras. Con cuidado y paciencia, pueden ser avistadas desde las mismas pasarelas o desde alguno de los observatorios existentes. Sin olvidar que el entorno también es un paraje propicio para poder ver sobrevolar majestuosos al buitre leonado, al buitre negro, al milano negro o al águila imperial.

Los visitantes que acuden a Torre de Abraham podrán complementar su estancia con una visita al Centro de Visitantes donde se puede observar una exposición sobre Cabañeros y el agua, con una maqueta a tamaño real sobre la flora y fauna asociada a los bosques de ribera.

El Parque Nacional, que a punto estuvo de convertirse en campo de tiro, es hoy uno de los rincones protegidos más valiosos de los Montes de Toledo y refugio de muchas especies en peligro de extinción. Sus 42.000 hectáreas hacen posible que encuentren acomodo en este espacio natural numerosas especies de fauna y flora endémicas, muchas de ellas amenazadas, que hallan en el Parque uno de los últimos reductos donde conservarse.


Parque Nacional de Cabañeros

















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