Camps niega su implicación en supuesta red corrupta

El presidente valenciano, Francisco Camps, desmintió el jueves con rotundidad las informaciones aparecidas sobre su presunta implicación en la trama de corrupción que está investigando el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, y el Partido Popular anunció que presentará una denuncia por la filtración de un sumario secreto.

cargos públicos protegidos por el fuero parlamentario - dentro de la trama encabezada presuntamente por el empresario Francisco Correa, y citan a Camps como uno de los posibles implicados.

"Esto, más que una causa, parece un proceso abierto contra todo un partido político. Como tal así lo asumo y desmiento totalmente esta información", señaló Camps en una declaración institucional leída ante la prensa.

El presidente del PP, Mariano Rajoy, defendió la honradez del político valenciano.

"Puedo decirle que el señor Camps es un dirigente ejemplar y que cuenta con un pleno apoyo del PP y en este momento esta en indefensión y aún hoy es la fecha que ni la Fiscalía, ni el juzgado nos dicen si está o no acusado y de qué está acusado. El y otras muchas personas".

El responsable de comunicación del PP, Esteban González-Pons, pidió en una rueda de prensa el levantamiento del secreto del sumario e insistió en la idea de que todo forma parte de una trama contra el partido en plena campaña electoral en Galicia y el País Vasco.

"Tengan la certeza de que nos sentimos indefensos y tengan la certeza de que tenemos la sensación de que alguien quiere que tengamos miedo", dijo González-Pons en rueda de prensa.

La Fiscalía presentó el miércoles a Garzón un informe en el que señalaba que la investigación debía pasar en su totalidad al Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), salvo determinados hechos que se podían separar y que corresponderían al de Valencia.

Aunque no trascendió el contenido completo del informe, su solicitud de elevar la investigación al TSJM hace ver que vislumbra indicios de delito en personas aforadas.

El País, que ha publicado numerosas informaciones sobre la "operación Gürtel" pese a ser el sumario secreto, cita a fuentes de la investigación que señalan que el informe de la Fiscalía habla de una "pequeña ramificación de la red corrupta con el pago de supuestos sobornos por los negocios facilitados desde la Comunidad Valenciana".

El diario dice que en las grabaciones aportadas en la denuncia sobre la trama aparece una frase de una imputada que alude al pago de 30.000 euros en trajes para Camps. Según afirmó esta mañana el presidente valenciano en su comparecencia, la propia autora de la frase habría desmentido posteriormente al juez Garzón esta afirmación.

El Periódico de Catalunya, que cita fuentes del ministerio público, señala en cualquier caso que "las evidencias contra el presidente Camps podrían ser insuficientes para que sea objeto de una imputación formal".

FILTRACIONES INTERESADAS

El presidente de la Generalitat Valenciana, que defendió sus "20 años de vida pública al servicio del interés general", anunció querellas para defender su honor y el del PP y denunció un "proceso mediático paralelo sin garantías" con filtraciones interesadas que no "han soportado el paso de una sola jornada".

Camps, considerado uno de los líderes más valorados dentro del PP y que sonó incluso como uno de los posibles candidatos a suceder a Mariano Rajoy al frente del partido, aludió también a una encuesta de la que tuvo conocimiento el miércoles según la cual el PP habría aumentado su ventaja frente al PSOE en la Comunidad Valenciana.

"Esta debe ser mi culpa", declaró.

Garzón envió el pasado miércoles a prisión al presunto cabecilla de la trama, y a sus dos colaboradores más estrechos, entre ellos el ex secretario de organización del PP en Galicia Pablo Crespo, por considerar que sobornaron a cargos públicos de Madrid y Valencia para obtener favores empresariales con los que se enriquecieron.

El PP asegura que la única relación que tenía con esta trama es que contrataba servicios a empresas investigadas, y ha acusado al PSOE de orquestar una "campaña de acoso y difamación" ante la cercanía de las elecciones autonómicas de Galicia y País Vasco del próximo 1 de marzo.