La primera ministra ucraniana y candidata a la Presidencia, Yulia Timoshenko, anunció hoy que ha ofrecido la jefatura de Gobierno al magnate bancario Serguéi Tiguipko a cambio de su apoyo en la segunda vuelta electoral.

"Le he propuesto a Tiguipko no sólo unificar nuestros programas electorales y ser socios fiables, sino también le ofrecí el cargo de primer ministro", aseguró Timoshenko en rueda de prensa.

Timoshenko, que se enfrentará el próximo 7 de febrero al líder opositor prorruso, Víctor Yanukóvich, subrayó que el programa electoral de Tiguipko, el tercer candidato más votado en las elecciones del pasado domingo, "es en un 90 por ciento" el suyo.

La carismática política ucraniana logró un 25,05 por ciento de los votos en la primera vuelta, diez puntos menos que Yanukóvich (35,32), que se perfila como el gran favorito a la victoria dentro de tres semanas.

Tiguipko, ex presidente del Banco Central y jefe de campaña de Yanukóvich en los comicios presidenciales de 2004 que desembocaron en la Revolución Naranja, obtuvo el domingo un 13,03 por ciento de los votos.

"Puedo decir que incluso si Tiguipko no acepta mi propuesta (...) tras la victoria en las elecciones presidenciales repetiré la oferta", dijo Timoshenko.

Según todos los analistas, Tiguipko tiene la llave de la victoria, pero por el momento se ha negado a respaldar públicamente a cualquiera de los dos candidatos.

"Sí, he mantenido conversaciones con Timoshenko y también con Yanukóvich el mismo día. Hay propuestas concretas, pero por ahora mi postura no ha cambiado", dijo.

Tiguipko añadió que ambos candidatos sólo han hecho promesas vagas, pero no han presentado un plan de reforma para sacar el país de la crisis, por lo que tendrían que cambiar mucho las cosas para que él decidiera tomar partido.

Otro candidato con el que el equipo de Timoshenko ha comenzado a negociar es con el liberal Arseni Yatseniuk, ex presidente de la Rada Suprema (Legislativo) y que recibió un 6,96 por ciento de los votos, pero éste dejó claro hoy que no apoyará a nadie.

"No apoyaré a ningún candidato, ya que yo mismo y mi partido competimos tanto con Timoshenko como con Yanukóvich", comentó.

La primera ministra mantiene que las fuerzas liberales ucranianas lograron un 60 por ciento de los votos el domingo, por lo que ha instado a la unidad de los demócratas para evitar la victoria de Yanukóvich.

Timoshenko mantiene que la victoria de Yanukóvich en los comicios conllevaría la pérdida de la independencia nacional y la interrupción del proceso de acercamiento de Ucrania a la Unión Europea.