La carísima seguridad de Tony Blair

La protección del ex primer ministro británico Tony Blair le cuesta al erario nada menos que 6 millones de libras (unos 6,5 millones de euros) al año, lo que le convierte en la persona con una seguridad policial más cara en el Reino Unido.

Según publica hoy "The Daily Telegraph", que cita una fuente gubernamental, más de 20 policías velan por la seguridad de Blair, el doble del contingente que custodia a su sucesor en la jefatura del Gobierno, Gordon Brown.

La factura de la protección del ex líder laborista se encarece por sus frecuentes viajes al extranjero, donde ha firmado lucrativos contratos en el sector privado.

Antes de que Blair emprenda esos viajes, Scotland Yard debe enviar un "equipo de avanzadilla" para examinar los riegos de seguridad.

Hasta 16.000 libras al día (unos 17.600 euros) paga el contribuyente británico para garantizar que Blair no sufra ningún percance o ataque terrorista.

Sin embargo, tanto gasto empieza a preocupar al Gobierno y a Scotland Yard, que creen que el ex mandatario, que ha ganado más de 18 millones de libras (casi 20 millones de euros) desde que dejó el poder en 2007, podría contribuir a sufragar los costes.

"Nadie tiene ningún problema con pagar su seguridad cuando hace un viaje en nombre del Reino Unido o mientras está en su casa en este país. Pero parece justo que él haga una contribución a los costes de su protección cuando se ocupa de tareas privadas bien pagadas", dijo la mencionada fuente al periódico.

Para Dai Davies, ex jefe de la Brigada de Protección de la Realeza de Scotland Yard, Blair afronta una "verdadera amenaza" por su "papel al meter el Reino Unido en los conflictos de Afganistán e Irak".

"Sin embargo -puntualizó Davies-, si él se está beneficiando de la protección de Scotland Yard por razones comerciales, debería considerarse si hay que cobrarle precios comerciales por la protección.

La factura de la seguridad podría incrementarse el próximo año, cuando Blair, que cobra 100.000 libras (unos 110.000 euros), comparezca ante la investigación oficial del Reino Unido sobre la guerra de Irak.