El director catalán Cesc Gay, que recibe hoy el Premio Eloy de la Iglesia en el Festival de Málaga, ha asegurado que en el cine español "hay una personalidad muy marcada por parte de los directores, y en el setenta por ciento de las películas, el sello del director está detrás".

"Para bien o para mal de la industria, a diferencia de en otras cinematografías, somos todos muy cercanos, cada uno en su mundo, y el cine se hace más desde los directores que desde los productores", ha afirmado en rueda de prensa.

Por ello, pese a que el Festival de Cine Español otorga este premio cada año a un cineasta caracterizado por salirse de los cauces establecidos y buscar un cine personal e innovador, Gay nunca se ha considerado "muy diferenciado de la mayoría de los directores", especialmente los de su generación.

"No sé si el premio vendrá bien o mal a mi carrera, porque hoy en día el cine innovador, personal y de autor ya está muriéndose", ha dicho el galardonado, que ya ganó en 2000 el premio a la mejor dirección en el Festival de Málaga por "Kràmpack".

En los primeros momentos de una carrera, "los premios marcan mucho, porque ayudan a creer en lo que haces y a que los demás se crean que puedes hacer buenas cosas, y el premio a la dirección fue muy especial".

Sin embargo, la película de su filmografía que recuerda con más cariño es la primera, "Hotel Room", que rodó en Nueva York "con un amigo".

"Fue un acto de irresponsabilidad absoluta, porque la financiamos con las tarjetas de crédito de los amigos y las novias del momento, a los que nunca les devolvimos el dinero, y la hicimos entre cuatro", ha recordado.

Sobre la crítica, considera que "hay que dejarla en paz, porque tiene que hacer su trabajo", y en su caso le ha "tratado bien muchas veces", por lo que si en algún momento hay opiniones negativas "no está bien que uno se queje".

Al preguntársele por la escasa presencia del sexo en sus películas, lo justifica porque siempre le ha "aburrido" en el cine, "a no ser que veas una porno, que es otra cosa".

"Hay pocas películas en las que veas sexo y no sea el típico plano con dos cuerpos. Es algo muy estereotipado, y nunca me ha parecido una escena interesante para filmar. 'Átame' (de Pedro Almodóvar) es la única película en la que me gustaba el sexo que había", ha explicado.

Respecto a su predilección por trabajar con actores como Eduard Fernández, ha apuntado que "conforme se va conociendo a los actores es más fácil".

Gay ha presentado un avance de su próxima película, "Una pistola en cada mano", en cuyo reparto figuran Eduard Fernández, Ricardo Darín, Luis Tosar, Javier Cámara, Eduardo Noriega, Alberto San Juan, Candela Peña, Leonor Watling y Clara Segura.