Cinco personas han fallecido y ocho se encuentran heridas debido a unos enfrentamientos que comenzaron anoche en la zona de Al Huzuz entre musulmanes y cristianos, según han manifestado los cuerpos de seguridad del país este sábado. La misma fuente ha informado que entre los fallecidos, hay cuatro cristianos y un musulmán. 

La hostilidad entre los grupos se desató la pasada noche junto a una iglesia en la provincia de Al Qaliubiya, al norte de El Cairo. Los miembros de ambas comunidades empezaron lanzarse disparos en la capital egipcia. Las disputas se han prolongado hasta esta mañana, según ha informado la misma fuente oficial. 

Por el momento, lo único que se sabe es que los ataques violentos podrían haberse desencadenado la pasado noche cuando un grupo de niños cristianos pintaban en la pared de un centro musulmán. Los heridos han sido trasladados a varios hospitales cercanos según informa la misma fuente.

Los enfrentamientos entre cristianos y musulmanes han aumentado desde el derrocamiento del ex presidente Hosni Mubarak en 2011, cuando se dio rienda suelta a los islamistas más radicales reprimidos bajo el anterior gobierno. 

Las policía ha detenido a 15 personas y en estos momentos la zona ya se encuentra en calma y con una fuerte presencia policial. Alrededor de 15 vehículos de la policía se encuentran patruyando las inmediaciones donde estalló el conflicto. 

El presidente Mohamed Mursi,  líder de la Hermandad Musulmana elegido en junio, se ha comprometido a proteger los derechos de los cristianos, que representan alrededor del 10% de 83 millones de habitantes que tiene el país egipcio.

'Los disturbios sectarios ocurridos en Al Huzuz son inaceptable y graves' ha manifestado en su página de facebook Saad al-Katatni, el jefe del partido político Hermanos Musulmanes, quien añadió que 'hay quienes quieren crear crisis y  llamas en el país'.

Las tensiones sectarias a menudo han estallado en violencia, especialmente en las zonas rurales, donde las rivalidades entre clanes o familias a veces se suman a la hostilidad. Relaciones amorosas entre musulmanes y cristianos también han despertado enfrentamientos en el pasado.

Desde que Mubarak fue derrocado por el levantamiento popular de la plaza de Tahir, los cristianos se han aquejado de varios ataques a las iglesias llevados a cabo por islamistas radicales y de la dificultad para obtener un permiso para construir una iglesia. Además, Reuters informa que han aumentado el número de denuncias de cristianos por marginación en el entorno laboral.