La coalición liderada por Estados Unidos en Afganistán denunció hoy que los insurgentes talibanes continúan usando municiones con fósforo blanco en sus ataques contra los soldados internacionales desplegados en el país.

Según un comunicado, los talibanes usaron explosivos y munición con fósforo blanco contra un puesto de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) en una ofensiva registrada ayer en el distrito de Gayan, en la provincia oriental de Paktika.

La Coalición reveló la semana pasada que los insurgentes han llevado a cabo en los últimos años ataques contra las tropas durante los que utilizaron fósforo blanco, que puede producir intensas quemaduras, aunque los insurgentes lo negaron.

El portavoz de los talibanes, Qari Muhammad Yousaf Ahmadi, explicó el pasado día 11 a la agencia afgana AIP que la insurgencia "no dispone" de fósforo ni ha utilizado este tipo de material.

Según Ahmadi, Afganistán es un laboratorio para el Ejército estadounidense, hasta el punto de que se han probado en el país "todo tipo de armas", mientras el Gobierno afgano no tiene "poder para impedirlo".

En su comunicado divulgado la semana pasada, la Coalición mantuvo que la insurgencia ha tenido acceso y utilizado munición con fósforo blanco contra soldados de las fuerzas aliadas en hasta 38 ocasiones.

En esa misma nota reconoció que tanto la ISAF como la Coalición utilizan esta arma química, aunque respetando los casos definidos por las leyes internacionales.

Estas permiten el uso de la sustancia para el seguimiento de tropas, la localización de objetivos, la iluminación de zonas, la destrucción de edificios y búnkers desocupados, así como de sistemas armamentísticos, y la demolición de otros materiales inflamables.

En el comunicado emitido hoy, el mando militar estadounidense añade a las denuncias previas que las tropas de la ISAF encontraron el pasado sábado nueve morteros fabricados con fósforo blanco en la provincia de Bamyan.

También desactivaron ese mismo día un proyectil con la misma sustancia química que amenazaba una de sus bases de operaciones en el distrito de Kama, en la provincia de Nangahar, y que luego fue inutilizado, según la nota.