Este artículo se publicó hace 13 años.
La cocina de los taquillazos
Las productoras de televisión apuestan por las recetas de las series que triunfan para repetir su éxito en el cine
Rocío Ponce
No es que Mario Casas esté en todas partes. O sí. La sensación de que el joven actor gallego copa las pantallas con sus músculos y su amable sonrisa tiene una explicación: Mario Casas vende. Al menos de momento. Sin embargo, no es el único actor que se repite en las producciones de cine y televisión de nuestro país. Otros nombres como Alexandra Jiménez, Blanca Suárez o Julián López son indispensables en cada proyecto que busca arrasar tanto en la pequeña como en la gran pantalla. Y no se trata sólo de actores, también guionistas y directores e incluso productores saltan de la pequeña a la gran pantalla.
Mañana, una nueva producción, protagonizada por rostros más que conocidos de la ficción televisiva (Hugo Silva, Adriana Ugarte, Áex Barahona y Rubén Sanz) llega a los cines. Es Lo contrario al amor, la nueva apuesta por la comedia romántica de Antena 3 Films. Es sólo el comienzo: el nuevo curso llega con grandes producciones llamadas a ser los nuevos bombazos entre los que destacan Fuga de cerebros 2, Tengo ganas de ti (secuela de la muy televisiva Tres metros sobre el cielo), XP3D y Lo mejor de Eva.
Contar con actores que arrastren las millonarias audiencias de sus series al cine es una de las características que definen a la mayoría de los filmes producidos por televisiones. Guilain Barrois, consejero delegado de Telecinco Cinema, explica que su productora apuesta siempre que puede por "los nuevos talentos". Una de ellos es la actriz Alexandra Jiménez, quien opina que en España ya es "habitual" que las caras en tele y cine sean las mismas. Barrois cree que es una práctica frecuente que los profesionales del cine trabajen en estos dos medios porque "la bolsa de actores en España es limitada". Pero, ojo, porque tener al ídolo de quinceañeras Mario Casas en el cartel de una película "no es sinónimo de éxito seguro", dice el director de Tres metros sobre el cielo y Fuga de cerebros, Fernando González Molina, que recuerda que Casas ha hecho películas que "no han funcionado tanto".
Los primeros puestos de cine español en las taquillas llevan años monopolizados por producciones de cadenas de televisión. Y la tendencia, excepciones torrentianas aparte que cuenta con el apoyo de Antena 3, pero sólo en la compra de derechos de emisión, no en la producción, se antoja duradera mientras siga vigente la Ley General de la Comunicación Audiovisual que obliga, como llevan denunciando desde hace años desde Antena 3 Films y Telecinco Cinema, a las televisiones a invertir un 5% de sus ganancias en películas, series y tv movies. Una imposición que ha acabado por convertir a estas empresas en piezas indispensables del puzzle de la industria del cine español.
Para crear taquillazos como el de la romántica Tres metros sobre el cielo (casi diez millones de euros de recaudación en 2010) o la comedia de parodias, Spanish Movie (más de siete millones en 2009) hay que tener un generoso presupuesto y mucha visión catódica. Esta es la mayor "ventaja" de las productoras, explica Barrois, que cuenta con 25,6 millones de euros para invertir en cine por parte de Telecinco Cinema en 2011 (el 3% que la ley les obliga de los 855,1 millones que el grupo mediático facturó en 2010). Por su parte, Antena 3 cuenta en su cartera con 24,2 millones de euros para cine este año.
Pero es la promoción la pieza clave en el tablero .González Molina cree que "de no ser por el aparato promocional que tenían detrás sus películas no habrían tenido el mismo éxito". Según Pau Brunet, editor de www.boxoffice.es, web de referencia sobre el comportamiento de la taquilla, las televisiones tienen un gran "poder mediático y son una fuerte credencial para el resto de la industria". Esta ventaja las separa de las productoras independientes que tienen que buscar alternativas más económicas para competir en publicidad. Puy Oria, de Oria Films (productora independiente de películas como No tengas miedo y Obaba) explica que ellos, que suelen producir solos o con productoras extranjeras, se están volcando con las redes sociales, "echándole imaginación" y teniendo como referencia las tácticas americanas.
González Molina, que también ha dirigido series de éxito como El Barco y Los Hombres de Paco (ambas de Antena 3), opina que "los que trabajan en televisión aumentan sus reflejos en cuanto a las demandas del público: qué buscan, qué quieren que les cuenten y por eso tienen más facilidad para trasladarlo al cine".
¿Producto de masas?Puy Oria considera que en muchas ocasiones las películas producidas por televisiones tienen "un tempo, lenguaje y diseño bastante televisivo". Aquí comienza otro debate: "El cine es más que cine de autor", apunta Molina, que opina que hay una "mirada condescendiente y estrecha" hacia películas que buscan entretener y evadir al público simplemente. La actriz Alexandra Jiménez opina que no es algo nuevo: "Ese tipo de películas ha existido siempre".
Hugo Silva y Adriana Ugarte estrenan mañana Lo contrario al amor', producida por Antena 3 Films y Zeta Audiovisual.
La pregunta es: ¿qué buscan las cadenas cuando se meten en cine? Mikel Lejarza responde: "Cuando hacemos películas buscamos que llenen las salas de cine y que en su pase televisivo en prime time alcancen una cuota máxima de pantalla". Y eso se traduce en cine "dirigido a un público amplio y comercial", explica Lejarza. Guislain Barrois explica que la línea de Telecinco Cinema es diferente: "Queremos variedad e intentar llegar a todos los públicos con superproducciones como Ágora y Lo imposible, de Juan Antonio Bayona con Naomi Watts e Ewan McGregor, y con proyectos pequeños y más arriesgados como Verbo, de Eduardo Chapero-Jackson".
Entonces, ¿la clave está en trasladar series que funcionan al cine? González Molina cree que traspasarlas tal cual es "un error". Lo que intentan hacer, según el director, es "mantener un pulso narrativo, tipos de historias, géneros...".
Cuesta creer que sea así, con ejemplos como No lo llames amor... llámalo X , estrenada el pasado abril, dirigida por Oriol Capel y coproducida por Antena 3 Films y Producciones Aparte. La sucesión de gags, historias de enredos e incluso el tono cómico del filme hace imposible disociarla de un capítulo de Aída en el que a Luisma y Mauricio se les podría haber ocurrido reunir a sus esperpénticos amigos para hacer una película porno. Probablemente, tener a Paco León, Mariano Peña y Ana María Polvorosa (protagonistas de la serie y de la producción cinematográfica) estimule también tal asociación. En este caso, la alta rentabilidad de cada capítulo de Aída en Telecinco, con unos tres millones de audiencia de media, no se puede comparar con la modesta recaudación (615.276,43 euros) de la película en pantalla grande.
La línea entre las producciones cinematográficas y televisivas se difumina en casos como este, pero no significa necesariamente que la audiencia cambie la comodidad del sofá por la butaca del cine. González Molina cree que el traslado de modelos no funciona porque "el público es más exigente en el cine, porque lo elige y lo paga, y la televisión le viene dada".
Puy Oria, de Oria Films, cree necesaria la variedad en el cine para que el público "pueda elegir", pero critica el sistema y la industria que no permite "hacer todos los posibles modelos de producción. Algunos juegan con muchas menos posibilidades". Desde la independencia de su productora, Oria recuerda que no todos los productores buscan hacer sólo dinero. "Obviamente tenemos que financiar el producto, pero nos diferenciamos por la línea de trabajo, nosotros hacemos un cine social", explica. Una filosofía de empresa diferente a la de Antena 3 Films: "No nos hacemos trampas a nosotros mismos, queremos un cine de éxito. Esto es el show business, no el show art", dice Mikel Lejarza.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.