Los defensores del matrimonio entre personas del mismo sexo lanzaron el lunes su campaña para revocar una prohibición a este tipo de uniones en California, esperando ser el primer estado de Estados Unidos en convencer a los votantes de aprobar el derecho de los homosexuales a casarse.

En los cinco estados del país norteamericano en los que el matrimonio homosexual está permitido -Iowa, Connecticut, Massachusetts, New Hampshire y Vermont- el derecho se logró a través de los tribunales y acciones legislativas.

En cada estado en el que el asunto ha quedado en manos de los votantes, el matrimonio entre gays ha sido rechazado, incluyendo la aprobación de California del 2008 a la prohibición conocida como Proposición 8.

Los votantes en Maine hace dos semanas revocaron una ley estatal que permitía matrimonios entre parejas del mismo sexo.

"Todos los ojos están sobre California ahora", dijo John Henning, director ejecutivo de Love Honor Cherish, un grupo de derechos homosexuales de California, y uno de los líderes de una campaña por recaudar 1 millón de firmas para que la medida sea sometida a votación en noviembre de 2010.

La recogida de firmas comenzó el lunes después de que el estado aprobara la retórica propuesta para la votación.

Se espera que la batalla por la medida que aprobaría el matrimonio homosexual cueste decenas de millones de dólares a ambos lados del debate.

Grupos de derechos homosexuales más grandes, que incluyen a Equality California, han expresado preocupación porque la elección del próximo año pueda estar demasiado cerca para cambiar suficientes opiniones y ganar los comicios.

La Proposición 8 de California, que limitó el matrimonio a la unión entre hombre y mujer, obtuvo un 52 por ciento de apoyo hace un año. La votación sorprendió a defensores de derechos homosexuales en el país y dio una gran victoria a los conservadores sociales que se oponen al matrimonio gay.

El principal tribunal de California había legalizado el matrimonio entre parejas del mismo sexo previamente este año.