Este artículo se publicó hace 16 años.
Conde-Pumpido consigue el respaldo mayoritario del Congreso como fiscal general
Cándido Conde-Pumido, candidato del Gobierno para el cargo de fiscal general del Estado, ha obtenido hoy el respaldo mayoritario del Congreso, tras una comparecencia en la que ha apelado al consenso para acometer una modernización tecnológica que ayude a evitar errores.
Tanto el grupo socialista, como CiU y el PNV han considerado a Conde-Pumpido un candidato idóneo para el puesto, mientras que el PP y el Grupo Mixto se han opuesto con duras críticas a su nombramiento y ERC-IU-ICV ha mostrado su escepticismo.
Ha sido la primera vez en la que un candidato a fiscal general comparece antes de su nombramiento ante la Comisión de Justicia del Congreso, procedimiento introducido en la reforma de la Ley del Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal el pasado mes de octubre con el objeto de examinar los méritos y la idoneidad del mismo.
En referencia a casos como el de la niña Mari Luz Cortés y el crimen de Alovera, Conde-Pumpido ha explicado que estos acontecimiento han demostrado que, aunque las nuevas tecnologías "no pueden seguramente eliminar el error humano, sí pueden contribuir a evitar que algunos se produzcan o incluso a paliar sus consecuencias".
Por ello, ha colocado la modernización tecnológica entre sus "objetivos irrenunciables" a corto plazo.
Por su parte, el portavoz del PP, Ignacio Astarloa, ha enumerado los "deméritos" de Conde-Pumpido y ha calificado su comparecencia como un "paripé" histórico, por ser un mero trámite que no afecta al nombramiento.
Astarloa ha acusado a Conde-Pumpido de actuar al servicio de las ideas de un partido político y de convertir la defensa de la ley en "la burla de la ley", tras lo que ha insistido en que "lo mas grave" es que con su inacción ha permitido "la vuelta del rostro político del terrorismo al Parlamento y a los ayuntamientos vascos".
Para el portavoz del PP, no es un buen mensaje, de cara a la búsqueda de acuerdos para afrontar la crisis de la Justicia, que el Gobierno presente un candidato cuya dimisión han pedido los populares docenas de veces.
Frente a las críticas del PP, Julio Villarrubia, del grupo parlamentario socialista, ha defendido la figura de Conde-Pumpido y ha asegurado que la inmensa mayoría de los demócratas piensan que durante su anterior mandato ha defendido con valentía los derechos de los ciudadanos.
El portavoz socialista ha destacado la necesidad de que haya una coordinación entre la Fiscalía, el Gobierno y las CC.AA. en la utilización de los medios tecnológicos que permitan "saber al segundo" las personas que han cometido delitos.
Por su parte, Jordi Jané, de CiU, ha asegurado que hay un colapso "absoluto" en la Administración de Justicia, y que es necesario un Pacto de Estado para, entre todos, elaborar un diagnóstico y proponer medidas cuanto antes.
La Justicia "es un reloj atrasado y colapsado", ha dicho Jané, que ha considerado que Conde-Pumpido reúne el mérito y la idoneidad necesarios para ocupar el cargo.
El diputado del PNV, Emilio Olabarria también ha avalado la candidatura de Conde-Pumpido, aunque le ha pedido que no se profundice más en las disfunciones democráticas que -a su juicio- ha provocado la Ley de Partidos Políticos.
La intervención más crítica ha sido la de la diputada de Unión, Progreso y Democracía (UpD), Rosa Díez, quien ha actuado como portavoz del Grupo Mixto y ha acusado a Conde-Pumpido de haber dado a los demócratas perseguidos por ETA "algunos de los días más tristes de nuestra historia democrática".
Junto Díez y al PP, el grupo de ERC-IU-ICV también se ha opuesto a la idoneidad de Conde-Pumpido como fiscal general.
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