El Consejo de Seguridad de la ONU conminó hoy a Siria a cumplir "con urgencia y visibilidad" su compromiso de poner en marcha el plan de paz del emisario especial del organismo y de la Liga Árabe, Kofi Annan.

Los quince, bajo la presidencia en abril de EE.UU., instaron a Damasco a cumplir "no más tarde del 10 de abril" el plan de paz de Annan tal como se comprometieron el pasado día 1 y que implica "el cese de los movimientos de tropas hacia las ciudades, el uso de armamento pesado y la retirada militar de los centros de población".

La presidenta de turno del Consejo, la embajadora estadounidense Susan Rice, leyó la declaración presidencial aprobada hoy por los quince como muestra de su apoyo a la misión de Annan, que comparecerá en breve ante la Asamblea General de la ONU, mediante una videoconferencia desde Ginebra, para explicar como evoluciona su mediación.

El Gobierno del presidente Bachar al Asad se comprometió el pasado 25 de marzo a cumplir los puntos que contiene el plan de paz de Annan y el pasado domingo le comunicó que lo haría antes del 10 de abril.

El plan de paz exige a todas las partes el inmediato fin de la violencia y de las violaciones de los derechos humanos, así como asegurar el acceso de personal humanitario al país, facilitar la transición política siria hacia la democracia o el inicio del diálogo político, entre otros.

El Consejo, además, subrayó la importancia de poner en práctica "un mecanismo de supervisión efectivo y creíble en Siria que vigile el cumplimiento del cese de la violencia armada en todas sus formas, así como los aspectos relevantes del plan de Annan".

Los quince también pidieron al secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, que realice "propuestas para poner en marcha ese mecanismo tan pronto como sea aprobado y tras consultar con el Gobierno de Siria".

El documento aprobado por el máximo órgano de seguridad internacional señala también que está preparado para autorizar la puesta en marcha de ese mecanismo de supervisión "efectiva e imparcial" de todas las partes.

También reiteró su llamamiento a las autoridades sirias para que permitan de forma inmediata el acceso de personal humanitario para que asista a las poblaciones más necesitadas y a cooperar con la ONU y las organizaciones humanitarias.

Igualmente subraya que para ello es necesario "la implementación inmediata de una pausa diaria de cese de hostilidades durante dos horas" tal como propone el plan de paz de Annan.

Los quince advierten a Damasco que "tomarán las medidas apropiadas" en función del cumplimiento de ese plan de paz.

Según datos de la ONU, desde el inicio de las protestas en Siria a mediados de marzo de 2011, más de 9.000 personas han perdido la vida, más de 200.000 se han desplazado a otras zonas dentro del país y 30.000 se han refugiado en los países cercanos, especialmente Turquía.

En Siria hoy murieron al menos 27 personas, entre ellas tres menores, según indicaron los grupos de oposición, pese a que Damasco ha asegurado a la ONU que ha empezado a retirar sus tropas de Deraa (sur), Idleb (norte) y Zabadani, en las afueras de Damasco.

Según los opositores Comités de Coordinación Local, hubo catorce muertos en la provincia central de Homs, siete en Idleb, tres en Hama (centro) y tres en Duma, en la periferia de la capital.

Los integrantes del primer equipo de la ONU que revisará desde hoy el cumplimiento del plan de Annan están dirigidos por el general noruego Robert Mood.