Un encuentro secreto entre representantes israelíes y un destacado miembro de Hamás en Cisjordania tuvo lugar el pasado martes en la ciudad israelí de Netanya para abordar cuestiones de interés mutuo, según informó ayer el diario árabe de Londres Al-Sharq al-Awsat citando 'fuentes palestinas'.

Por parte de Hamás habría participado Omar Abdel Razaq, que fue ministro de Finanzas en el primer Gobierno de la organización fundamentalista tras las elecciones de 2006, según la información del mencionado periódico de la que ayer se hicieron eco numerosos medios hebreos. Sin embargo, Abdel Razaq negó haberse desplazado a Netanya y haber conversado con representantes israelíes.

Al-Sharq al-Awsat informó que las conversaciones secretas entre Israel y Hamás giraron en torno al soldado Guilad Shalit, capturado por Hamás hace cuatro años, y a una supuesta amenaza de Hamás de capturar a colonos judíos que residen en los asentamientos de Cisjordania con la intención de canjearlos por prisioneros palestinos.

Israel asegura que no dialogará con Hamás hasta que la organización reconozca al Estado judío, y además ha conseguido que ningún país occidental converse con la organización fundamentalista, al menos de manera abierta.

Por otra parte, la única planta eléctrica que queda en la franja de Gaza se vio obligada a cerrar ayer por falta de combustible. El gasóleo necesario para el funcionamiento de la planta entra diariamente desde Israel pero los ingenieros dijeron que la planta permanecerá cerrada por lo menos hasta hoy, cuando está prevista la entrada de más combustible.

Los cortes de energía afectaron principalmente a la zona de la ciudad de Gaza. En los últimos meses, la planta apenas ha podido dar servicio entre seis y diez horas al día, debido a la disputa que Hamás mantiene con las autoridades palestinas de Ramala acerca del pago del combustible.