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Curar a Andrés habría superado los 60.000 euros

Andalucía sigue siendo la única comunidad que tiene regulada el trasplante de células del cordón umbilical como derecho de los ciudadanos

R. BOCANEGRA / O. CARBALLAR

Tras el éxito médico de la técnica por la que un bebé seleccionado genéticamente salva la vida de su hermano a través del trasplante de células del cordón umbilical el Ministerio de Sanidad, entonces dirigido por Bernat Soria, propuso la financiación pública en toda España, a cargo de los fondos de cohesión de su Departamento, y señaló como centro de referencia el hospital Virgen del Rocío (Sevilla). La promesa continúa en el aire el Ministerio, preguntado por este periódico, no aclara la cuestión y, de momento, Andalucía sigue siendo la única comunidad que tiene regulada esta técnica como derecho de los ciudadanos y que la oferta en su cartera de servicios a través de la sanidad pública.

El coste estimado del primer paso de la curación, la gestación del bebé libre de enfermedad, oscila entre 10.000 y 15.000 euros en la sanidad privada. Pero si no se produce el embarazo, y no hay embriones criopreservados, el proceso empezaría de nuevo. Es decir, habría que sumar 10.000 o 15.000 euros por cada intento. En el caso de la familia de Algeciras, la fecundación se produjo a la segunda, con lo que habrían tenido que desembolsar entre 20.000 y 30.000 euros sólo para que Javier hubiera nacido sano. A ello habría que haberle sumado otros 30.000 euros mínimo correspondientes al coste de la conservación del cordón umbilical, la medicación, el trasplante de Andrés y los gastos de desplazamiento al hospital. En un año tuvieron que viajar 162 veces desde Algeciras a Sevilla, un trayecto que supone unas dos horas de ida y otras dos de vuelta. Soledad es ama de casa; Andrés, camionero.

En España, desde que en 2006 el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero aprobó la ley que permite esta técnica, el ministerio ha autorizado 12 solicitudes con fines terapéuticos, la mayoría procedentes de la sanidad privada. Tres de las autorizaciones corresponden al Virgen del Rocío: la de Javier y Andrés y otras dos familias una de Córdoba y otra de Málaga, cuyo proceso ya ha comenzado. Uno de los niños padece también beta-talasemia, que afecta a la producción de hemoglobina. El otro caso se trata de una inmunodeficiencia severa por déficit de adenosín-deaminasa, algo que provoca infecciones múltiples y severas.

Gracias a esta técnica, ya han nacido en Andalucía 13 bebés libres de una enfermedad genética hereditaria y se esperan otros cuatro casos para el próximo año.

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