Defensa refuerza la presencia militar en el Índico ante el fin de los monzones

Este mes finaliza el periodo de monzones en el océano Índico, las aguas se tranquilizan y los piratas suelen aprovechar esas óptimas condiciones meteorológicas para lanzarse a alta mar en busca de buques que secuestrar.

Ante este riesgo, el Ministerio de Defensa ha decidido reforzar la presencia militar en la zona en el marco de la operación Atalanta de la UE contra la piratería en la que participa España. En concreto, la titular del departamento, Carme Chacón, anunció ayer el envío de dos buques adicionales y tres aviones de patrulla marítima.

Además, ante la agresividad de los piratas, la Armada embarcará en la fragata Canarias a un equipo preparado para una acción bélica. Hasta ahora, los militares embarcados en el buque, que ejerce el mando de la Fuerza Naval Europea, garantizaban la seguridad en las aguas del golfo de Adén y Somalia, dando protección tanto al tráfico mercante como a los pesqueros y repeliendo los ataques piratas.

La ministra explicó que la Atalanta también reforzará la Focus Operation que controla los puertos y las costas somalíes de las que parten los piratas.

Chacón mantuvo ayer una reunión con los representantes de los armadores españoles, con quienes consideró "positivamente" la medida impulsada por el Gobierno para embarcar agentes de seguridad privada en los pesqueros de bandera española.

El encuentro tuvo lugar en el Instituto Tecnológico Militar de La Marañosa, en Madrid, donde todos asistieron a una demostración del adiestramiento que efectivos militares imparten a los agentes de seguridad en el uso de armas pesadas. Con más o menos acierto, los aprendices dispararon con los fusiles y metralletas con los que viajarán en los barcos.