Este artículo se publicó hace 13 años.
Del Rivero estudia un contraataque en Sacyr
Se plantea forzar una Junta, pero tendría que ir a los tribunales
La estrategia del caballo de Troya que los opositores de Luis del Rivero emplearon con éxito la semana pasada para destituirle como presidente en Sacyr por su intento de ganar poder en Repsol abre un futuro de incógnitas. Del Rivero quedó tan "noqueado" en el tormentoso Consejo de Administración del jueves, en el que el 60% de los consejeros votó que se fuera, que no supo reaccionar, según fuentes conocedoras de la reunión. Pero otras fuentes de su entorno aseguran que no se queda quieto y está sopesando cómo batallar para recuperar poder. Forzar una Junta de Accionistas en la constructora es la vía más rápida y la tiene sobre la mesa.
El golpe para Del Rivero fue brutal cuando vio que su sustituto, y hasta entonces su número dos, Manuel Manrique, cambiaba el jueves su voto y se alineaba con las cajas en el primer punto del orden del día en un Consejo de alto voltaje. Se votaba el nombramiento de Victoria Vázquez como representante de Novacaixagalicia, cuyo presidente, José María Castellano, ha orquestado la oposición de las cajas a Del Rivero por su pacto con la petrolera estatal mexicana Pemex para controlar Repsol agrupando un 29,5% del capital. La idea del destituido presidente era bloquear el nombramiento del vocal de las cajas para menguar su poder. Pero Manrique dio el giro y votó con ellas.
Del Rivero pensó que había sido traicionado. El siguiente voto ya fue para descabalgarle como presidente y nombrar a Manrique. Cuando estecomenzó su discurso para agradecer la aportación de Del Rivero, este último y sus consejeros afines se levantaron y se fueron del Consejo.
Ahora, Del Rivero se está planteando una jugada similar a la que hizo en la constructora francesa Eiffage, cuando accionistas afines a Sacyr compraron acciones de la empresa gala para apoyar a la española en la Junta de Accionistas. Ahora, Del Rivero tendría que convencer a empresarios amigos para que adquirieran títulos de Sacyr en un momento en que ninguno está para gastos extra.
El 27% que Del Rivero controla en la constructora (junto con el cofundador de Sacyr José Manuel Loureda y el directivo Javier Gayo) le permite pedir la convocatoria de una Junta de Accionistas. Con un 5% ya se puede, según el Reglamento de la Junta de Sacyr. Pero esa misma norma encierra la respuesta que obtendría del bloque disidente que ahora gobierna Sacyr, capitaneado por Demetrio Carceller, dueño de la petrolera Disa. Este bloque, previsiblemente, se negaría y Del Rivero tendría que acudir al Juzgado de lo Mercantil. Esto desencadenaría la tercera batalla judicial de Del Rivero contra los accionistas de la constructora, ya que hay otros dos contenciosos abiertos.
De momento, lo urgente para Carceller, apoyado por el inversor Juan Abelló, es que Del Rivero dimita como vicepresidente de Repsol. Estudian la forma de que no vaya al Consejo de la petrolera el miércoles en nombre de Sacyr, ya que es una cita clave para sellar la paz entre ambas.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.