El consorcio energético alemán E.ON adelantó hoy que prevé para 2009 una caída del beneficio neto cercano al 10 por ciento y que espera igualar este año el resultado de explotación de 2008.

La empresa explicó que la crisis económica anticipa volúmenes más bajos de las ventas de gas y electricidad, y márgenes de precios más ajustados.

El consorcio también descontó en sus previsiones para 2009 los efectos derivados de la regulación de las redes de gas y electricidad en Alemania.

Como efecto positivo, E.ON citó la mejora de los márgenes de la generación de electricidad.

Respecto al dividendo para 2009 el consorcio espera mantener la ratio del 50 al 60 por ciento de su beneficio neto.

Para 2010, E.ON consideró de que "desde la perspectiva actual y de acuerdo a su cartera de clientes es posible incrementar el Ebit un 10 por ciento, hasta los 11.000 millones de euros".

En mayo de 2007 la compañía se fijó la meta de aumentar el Ebit hasta los 12.500 millones de euros en el 2010.

Esta revisión a la baja se explica, según E.ON, en que los efectos positivos esperados de los amplios márgenes en el negocio de la generación de energía serán mitigados parcialmente por la bajada de los precios de la electricidad y del volumen de ventas de gas debido a la crisis financiera.

E.ON añadió a la lista los efectos reguladores de las redes de gas y electricidad en Alemania y a una contribución de beneficios más baja de las nuevas unidades de mercado de la compañía.

La compañía dio a conocer sus pronósticos para 2009 en un breve comunicado a los accionistas previo a la presentación hoy de los resultados definitivos del ejercicio 2008, y de la rueda de prensa que ofrecerá su presidente, Wulf Bernotat, hacia las 09.00 GMT en la sede de E.ON en Düsseldorf.