Una empresa presidida por Rafael Español, ex presidente del grupo químico La Seda y muy cercano a la familia Pujol Ferrusola y a Artur Mas, ingresó 1,2 millones de euros en fondos que tienen su origen en la trama, según consta en el auto del juez Baltasar Garzón. La empresa, Promogroup Deu, tuvo como consejero a Macià Alavedra hasta principios de este año.

El auto detalla cómo Espais, dirigida por el imputado Lluís Casamitjana, y Procam, vinculada a la operación en Badalona, pagaron 1,46 millones a Poliafers (Lluís Prenafeta) y que este entregó a Versabitur (Macià Alavedra) 487.500 euros a través de Promogroup Deu, creada en 2001 y presidida desde entonces por Español. Alavedra fue consejero de Promogroup Deu hasta enero de 2009 y en mayo de este año abandonó su puesto de consejero en el Grupo Indukern, accionista de Promogroup Deu.

Este pago concreto se realizó en 2004, pero hubo más. El auto no los detalla, pero sostiene que Alavedra habría recibido fondos procedentes de operaciones de la trama por valor de 1,2 millones de euros a través de Promogroup Deu, que siempre ha estado presidida por Español, quien ayer no pudo ser localizado por este periódico.

Español es desde hace décadas uno de los empresarios más cercanos a la familia Pujol Ferrusola y también a Artur Mas. Por sus consejos de administración y equipos directivos en La Seda, cuya presidencia abandonó el pasado junio, pasaron Jordi Pujol Ferrusola, hijo primogénito del ex president de la Generalitat, el propio Artur Mas y Carles Vilarrubí, otro de los empresarios más cercanos a Pujol.

La química, que fue siempre un escenario de confrontación entre el mundo económico convergente y socialista, está presidida desde el pasado verano por José Luis Morlanes, ex teniente de alcalde de Urbanismo de José Montilla en Cornellà de Llobregat.

Según el auto Promogroup Deu ha movido al menos 1,2 millones de euros

Promogroup Deu, la empresa presidida por Español que según el auto ha movido al menos 1,2 millones de euros de la trama hacia las cuentas de Alavedra, tiene como prolijo objeto social la 'adquisición de fincas y solares para su edificación, directamente o por medio de contratistas, y la venta posterior de lo edificado en su totalidad o por bloques, plantas y departamentos'.

La empresa, que según el registro no tiene trabajadores, declaró en 2004 unos ingresos de 1,04 millones de euros. Según el auto, el ingreso de la trama fue ese año de 487.500. En los dos últimos ejercicios presentados ha declarado pérdidas: 129.248 euros en 2006 y 147.839 en 2007.

Otro aspecto del auto hace referencia a la emisión de facturas falsas por valor de 1,3 millones en el Ayuntamiento de Santa Coloma de Gramenet para justificar el empleo de unos fondos europeos. El escrito señala que las conversaciones se produjeron entre Luis García, Bartolomé Muñoz, Pascual Vela, Manuel Dobarco y Emili Mas, gerente del Instituto Catalán del Suelo (Incasòl).

La entidad se apresuró ayer a recordar que Mas no figura como imputado en la trama y que revisará su actuación con el ayuntamiento colomense.