La Fiscalía ordena proteger a los detenidos "de la curiosidad del público"

El fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, ha ordenado a los fiscales que, con el fin de garantizar el respeto a la dignidad de los detenidos, adopten "las oportunas cautelas para proteger a las personas trasladadas de la curiosidad del público y de todo tipo de publicidad".

En la instrucción 3/2009, titulada "Sobre el control de la forma en que ha de practicarse la detención", Conde-Pumpido dispone que el momento en que se lleve a efecto el arresto "debe ser cumplidamente ponderado" y que "no es aconsejable ordenar la detención en acontecimientos sociales o en lugares públicos, profesionales o de trabajo", salvo que exista riesgo de fuga.

También señala que "ha de evitarse, en la medida de lo posible, que aparezcan esposados o engrilletados frente a los fotógrafos y las cámaras de televisión".

Tras recordar que los detenidos mantienen el derecho a la presunción de inocencia, el fiscal general dice que "la información que se facilite a los medios de comunicación acerca de detenciones y traslados ha de respetar, en todo caso, el citado derecho, debiéndose evitar la difusión de datos e imágenes que de forma desproporcionada puedan afectar al honor de las personas".

La instrucción, fechada el pasado día 23, se dicta después de la polémica que suscitaron las imágenes de varios de los detenidos en la "operación Pretoria" contra la corrupción urbanística en varias localidades de Barcelona a su llegada el pasado 30 de octubre a la Audiencia Nacional, esposados y portando sus efectos personales en grandes bolsas de basura.