La comisaria europea de Agricultura, Mariann Fischer Boel, ha confirmado hoy que no repetirá en este cargo y que no formará parte del nuevo equipo de la Comisión Europea.

La danesa Fischer Boel ha declarado a la prensa, durante la reunión informal de ministros de Agricultura de la UE, que "no va a presentarse como candidata" para entrar en la composición del nuevo Colegio de Comisarios de la UE, que ejercerá su mandato en los próximos cinco años.

La comisaria ha afirmado que se trata de una decisión "tomada hace tiempo" y en la que ha influido mucho su edad (66 años): "si hubiera tenido diez años menos hubiera sido diferente (...) no creo que en cinco años esté en condiciones de funcionar al cien por cien y prefiero no seguir".

Asimismo, ha descartado pronunciarse sobre su posible sucesor y ha dicho que "la elección de los comisarios está en manos de los primeros ministros de los países de la UE" y si el Parlamento Europeo lo reelige, del presidente de la CE, José Manuel Durao Barroso.

Fischer Boel fue nombrada comisaria europea de Agricultura en 2004 y sucedió en el cargo al austríaco Franz Fischler.

Entre sus logros, la comisaria ha resaltado sus ideas por "orientar más la agricultura europea hacia las necesidades del mercado".

Asimismo, Fischer Boel ha bromeado sobre su futuro:"no soy muy buena haciendo punto" y ha advertido de que aunque no vaya a repetir en el cargo no piensa "debilitar" sus posturas ni ceder en sus posiciones, durante los debates del Consejo de Agricultura.

La actual comisaria agrícola fue anteriormente ministra de Agricultura y Pesca de su país entre 2001 y 2004; dentro de este período, con Dinamarca como presidencia de turno de la UE en 2002, moderó los debates y las negociaciones sobre la reforma de la Política Pesquera Comunitaria (PPC).

La llegada de Fischer Boel a Bruselas fue polémica por ser su marido propietario de una explotación agrícola que recibía subsidios de la UE, pero los servicios de la Comisión determinaron que esto no era incompatible con su cargo.

Fischer Boel (del Partido Liberal danés) ha impulsado reformas de mercados importantes para España como el del azúcar o el del vino, durante las que persiguió la reconversión de ambos sectores y el abandono de los productores menos competitivos.

También ha promovido la modificación del mercado de frutas y hortalizas.

Asimismo, durante el mandato de Fischer Boel los países de la UE aprobaron la revisión de la Política Agrícola Común (PAC), que supuso un incremento del recorte de las ayudas a los agricultores para reforzar otras medidas en el campo, las de desarrollo rural.

La reforma confirmó la liberalización del sector lácteo y el final de las cuotas lecheras en 2015.