MADRID/PALMA. -El ferry Sorrento de la compañía Trasmediterránea-Acciona que se incendió el martes a unas 18 millas al suroeste de Mallorca continúa a la espera de poder ser remolcado a tiempo a un lugar seguro y no quedar hundido en alta mar como sucedió hace escasos 15 días con el pesquero ruso Oleg Naidemov en Canarias.

Varias embarcaciones de Salvamento Marítimo trabajan en enfriar el casco del buque y en apagar los rebrotes de pequeñas llamas del incendio que, según la Delegación del Gobierno, está prácticamente controlado.  Mientras tanto, un remolcador del SAR navega hacia el buque con la esperanza de llegar a a tiempo de poder llevarlo hasta un puerto seguro y "minimizar cualquier tipo de riesgo medioambiental", según informó la ministra de Fomento, Ana Pastor, que sin embargo no dijo hacia dónde se dirigirá el ferry, cargado con 750 toneladas de fuel.

Fuentes de la Delegación del Gobierno también han informado de que por el momento no se ha producido ningún vertido de carburante ni de otras sustancias contaminantes.

Las 156 personas que viajaban a bordo entre pasaje y tripulación fueron evacuados a salvo. Únicamente una persona, un italiano de 35 años, resultó herido leve por inhalación de humo y otros cuatro fueron también atendidos. La prioridad de las autoridades ahora es evitar otra catástrofe medioambiental en uno de los principales destinos turísticos de nuestro país.

Zona de gran biodiversidad

La zona donde ha ocurrido el accidente es de las más importantes para la biodiversidad marina del Mediterráneo y ha sido propuesta para su protección por el Convenio de Barcelona debido a su riqueza en especies marinas como la poseidonia, el coral amarillo o los lirios de mar. Los científicos marinos de la Fundación Oceana que estudiaron sus aguas encontraron grandes poblaciones de especies pesqueras juveniles, así como invertebrados marinos o especies sensibles.

Los ecologistas de Greenpeace han pedido a las autoridades que pongan todos los medios disponibles para apagar el fuego y remolcar el bargo a un puerto seguro."Tras el reciente incendio del arrastrero Olega Naydenov en aguas canarias y la gestión de las labores de extinción, la organización ecologista está siguiendo este nuevo suceso con preocupación".

El Sorrento es un buque de 186 metros de eslora que además de pasajeros puede transportar hasta 150 vehículos y varios contenedores, recuerda Greenpeace, "con lo que la carga potencialmente contaminante podría aumentar".

"Por la elevada riqueza ambiental del archipiélago, si se hundiera el buque con su carga podría tener efectos en entornos como, según las corrientes de mar, el Parque Natural de Sa Dragonera, del poniente de Mallorca",advierten.