Este artículo se publicó hace 13 años.
El fotógrafo Manu Brabo habla con sus padres y se encuentra bien
Su madre ha confirmado que les ha llamado desde una prisión y les ha asegurado que "no es objeto de agresiones"
El fotógrafo gijonés Manu Brabo, retenido desde el pasado 5 de abril por las fuerzas del dictador libio, Muamar el Gadafi, ha llamado hoy por teléfono a sus padres, a quienes les ha dicho que se encuentra bien en una prisión militar de Trípoli.
Así lo ha manifestado esta noche la madre del fotógrafo, Victoria Bravo, quien ha relatado que por vez primera desde que su hijo está retenido le han dejado llamar por teléfono y han podido hablar con él durante aproximadamente un cuarto de hora.
"Nos ha asegurado que le tratan bien y que no es objeto de agresiones en el centro en el que se encuentra junto con otros tres reporteros, y que le dan comida y tabaco", ha indicado la madre, quien ha añadido que sin embargo aún no le han dicho a su hijo cuándo le liberarán.
Manu Brabo ha comentado a sus padres que la detención fue un poco brusca y que le comunicaron que se debía a su entrada ilegal y hacer fotos sin permiso. "Al principio de la conversación estaba agobiado, pensando en que no sabíamos nada y del disgusto que tendríamos, pero luego se ha ido tranquilizando a medida que avanzaba la conversación", ha comentado la madre del fotógrafo.
"Le dan comida y tabaco, aunque echa de menos un cepillo de dientes" Manu Brabo ha insistido a sus padres que "se encuentra bien, que le dan de comer y tabaco, pero que echa de menos un cepillo de dientes". Victoria Brabo ha comentado: "Se ha animado mucho cuando le hemos hablado de toda la gente que se está preocupando desde aquí por él".
Los padres del fotógrafo han comunicado esta conversación a los responsables del Gobierno de España que tratan de que Manu Brabo pueda ser liberado. "Desde Asuntos Consulares nos han dicho que se iban a poner en contacto con el diplomático que lleva las gestiones en Libia y que nos irán informando", dijo la madre del fotógrafo gijonés.
"Tengo unas ganas locas de que venga", ha concluido Victoria Brabo, quien ha señalado que después de hablar con su hijo se encuentra algo más tranquila.
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