Este artículo se publicó hace 13 años.
Gadafi, sus hijos y siete de sus más cercanos colaboradores no podrán viajar
El dictador libio Muamar el Gadafi, sus ocho hijos y siete de sus más cercanos colaboradores no podrán viajar fuera de su país y si lo hacen, el país al que lleguen o en el que estén de tránsito tendrán que negarles la entrada.
El Consejo de Seguridad de la ONU así lo decidió ayer al aprobar por unanimidad una resolución que envía a Trípoli el firme mensaje de que la comunidad internacional no tolera las violaciones sitemáticas de los derechos humanos ni los ataques contra la población civil.
La resolución 1970 adoptada por el máximo órgano de decisiones de la ONU pide al Tribunal Penal Internacional (TPI), con sede en La Haya, que abra una investigación sobre esos ataques, que podrían haber dejado miles de víctimas, además de imponer un embargo total sobre las armas en Libia, congelar los activos financieros de los Gadafi y prohibirles viajar.
Sólo podrán viajar al exterior de su país cuando el comité de sanciones determine que está justificado por motivos humanitarios, incluidas las obligaciones religiosas, o cuando tengan que hacer una diligencia judicial, así como si el viaje es "necesario para promover la paz y la estabilidad" de Libia, dice la resolución.
La prohibición de viajar afecta además de a Gadafi -en el poder desde 1969-, a sus hijos, considerados todos "estrechos colaboradores del régimen", como es el caso de Aísha, de 32 años; Hanibal, de 35; Mohamed, de 40 y Saif al Arab, de 29.
Igualmente están afectados por la decisión Khamis, de 32 años y Saadi, de 38, ambos al cargo del mando de unidades militares que participaron en la represión de los manifestantes, y Mutasim, de 34, asesor de seguridad nacional.
Saif al Islam, de 39 años, director de la Fundación Gadafi y que en los últimos días ha sido la voz de la dictadura libia con "declaraciones públicas exaltadas animando a cometer actos de violencia contra los manifestantes", tiene igualmente prohibido viajar al resto del mundo.
Esa misma decisión del Consejo de Seguridad afecta al director de la inteligencia militar libia, el coronel Abdullah Al Senussi, de origen sudanés, cuñado del dictador y del que los quince señalaron que "sus antecedentes incluyen la sospecha de que participó en la masacre de la prisión de Abu Selim", en 1996, además de haber sido uno de los condenados en ausencia por el ataque contra el vuelo de la aerolínea francesa UTA en 1989.
Igualmente han sido sancionados el jefe de la oficina de enlace de los comités revolucionarios, Abdulqader Mohamed Al Baghdadi; el jefe de la seguridad personal de Gadafi, Abdulqader Yusef Dibri; el director de la organización de Seguridad Externa, Abu Zayd Umar Dorda y el ministro de Defensa, el general de división Abu Bakr Yunis Jabir.
En la misma lista está el secretario de servicios públicos, Matuq Mohamed Matuq, de origen iraní y con "antededentes de haber participado en la supresión del disenso y en actos de violencia", y Sayid Mohamed Gadafi, primo del dictador, y de quien el Consejo señala que "en los ochenta participó en la campaña de asesinatos de disidentes y se le presume responsable de varias muertes en Europa".
Además de esa prohibición, el Consejo de Seguridad de la ONU decidió congelar todos los bienes y activos financieros en el exterior de Muamar el Gadafi, así como de sus hijos Aisha, Hanibal, Khamis, Mutasim y Saif al Islam.
Con anterioridad a esta decisión del Consejo, algunos países como Estados Unidos, Reino Unido, Francia y Suiza ya habían decidido bloquear la fortuna que en sus territorios pudiera tener la familia Gadafi, que podría ascender a varios miles de millones de dólares, y que con la entrada en vigor de esta resolución deberá revertir en el pueblo libio.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.