Google pagará al sector editorial de cara a su proyecto online

Google ha alcanzado un acuerdo legal con los representantes de los autores y las grandes editoriales estadounidenses que abre el camino a que los lectores puedan buscar en Internet millones de libros con derechos de autor, pasajes concretos y comprar copias.

Según el acuerdo del martes, Google pagará 125 millones de dólares (unos 100 millones de euros) para crear un Registro de Derechos de Libros, en el que autores y editores pueden registrar sus obras y recibir compensaciones de subscripciones institucionales o ventas de libros.

La firma con el Sindicato de Autores y con la Asociación de Editores de Estados Unidos cierra una batalla legal de tres años en torno al plan de Google de poner muchos de los grandes libros del mundo disponibles para su búsqueda en Internet.

La demanda que presentaron las editoriales McGraw-Hill, las divisiones de Pearson Pearson Education y Penguin y los sellos de CBS Simon & Schuster y John Wiley & Sons afirmaba que los intentos de Google por escanear obras sin su permiso violaban las protecciones de derechos de autor.

La polémica enfrentaba los derechos de los propietarios de los derechos de autor con el "uso legítimo" público, que supone utilizar partes limitadas de libros para comentarlas, en algo parecido a un catálogo de fichas de biblioteca con textos completos.

El acuerdo alcanzado está aún pendiente de aprobación judicial.

"Ha sido una negociación larga y ardua", afirmó Paul Aiken, director ejecutivo del Sindicato de Autores, definiendo el acuerdo como "el mayor trato sobre libros en la historia editorial de EEUU".

millones de millones de libros descatalogados y muchos en catálogo - encontrarán un nuevo hogar y nuevos lectores online".

En un principio, el Proyecto Print Library de Google ofrecía en las búsquedas fragmentos de tres o cuatro líneas de los libros, pero ahora espera suministrar hasta una página de cada uno.

Además, se ofrecerá a las bibliotecas estadounidenses un portal en el que sus usuarios podrán imprimir páginas por una cuota. También se permitirán subscripciones institucionales a docentes y alumnos universitarios.