Aunque el Barcelona se ha clasificado matemáticamente para los octavos de final como primero de grupo, su técnico, Josep Guardiola, ha querido dejar claro que el partido de mañana ante el Shakhtar Donetsk, que cierra la primera fase de la Liga de Campeones, "no es un amistoso".

Para Guardiola, un partido de 'Champions' merece siempre "la máxima atención", y el rival, "el máximo respeto". Además, se trata de la máxima competición continental, ""donde hay que defender siempre la imagen del club en toda Europa".

El entrenador del Barcelona espera, al menos eso, que su equipo dé una buena imagen ante los ucranianos. "Intentaremos seguir haciendo cosas buenas en Europa, reforzar lo que ya hacemos bien e intentar hacer bien lo que aún no sabemos hacer del todo", ha argumentado.

Aunque Guardiola se ha empeñado en disimularlo, la máxima preocupación ahora mismo no es el equipo de Donetsk sino el clásico del próximo sábado ante el Real Madrid, el motivo por el ha dejado fuera de la convocatoria a ocho de sus titulares.

El técnico barcelonista insiste en que ante el conjunto ucraniano sacará "el mejor equipo posible para ganar", pero en él no estarán Valdés, Puyol, Eto'o, Xavi, Alves, Messi y compañía, porque así lo ha decidido.

Con todo, Guardiola recela del Shaktar, un rival que querrá vengar la derrota sufrida en Donetsk (1-2), con un gol de Messi en el último minuto. "Allí nos costó. Quise probar unas cosas y me salió una castaña, aunque al final ganamos", ha recordado.

Guardiola ha subrayado que los ucranianos empezaron mal en la Liga de su país, "pero ahora se han reenganchado al campeonato y atraviesan un buen momento", y que si no han llegado más lejos en la Liga de Campeones es "porque no han tenido suerte", como contra el propio Barça en casa o el Sporting fuera, "donde también tuvieron oportunidades para ganar".