Este artículo se publicó hace 16 años.
Hermida y Suárez revalidan sus puestos del pasado año al lograr oro y plata
El ciclista catalán José Antonio Hermida revalido el título de campeón de España de ciclocross, categoría elite, al imponerse en la prueba disputada en un circuito de la localidad burgalesa de Villarcayo.
La plata, también como en la pasada edición, fue para el cántabro Isaac Suárez, que llegaba ocho segundos después que el vencedor; mientras que el bronce fue para el vasco Javier Ruiz de Larrinaga que necesito once segundos más para finalizar la prueba.
Una carrera que respondió al interés que había despertado al estar las principales figuras de esta modalidad deportiva y por ello que la emoción fuera una constante de principio a fin de la misma, a pesar de las adversas condiciones climatológicas, con frío intenso, aire y nubes amenazadoras de aguanieve que, afortunadamente, se las llevo el viento.
La prueba reina de los campeonatos, la elite, respondió a lo esperado: mucha igualdad en una prueba que estaba marcada a ser por eliminación, en la que a medida que se fueron consumiendo vueltas se fueron descartando alguno de los favoritos en el kilómetro cero de la misma.
El primero en descartarse, en quedarse, fue el cántabro Tino Zaballa, que tuvo una caída en la primera vuelta. Luego Oscar Vázquez, que acuso el esfuerzo de la temporada y no pudo estar a la altura de sus exhibiciones en las carreras otoñales y prueba de ello es que no llego a terminar el campeonato.
La prueba comenzó a definirse en la tercera vuelta cuando Suárez lanzó dio un tirón para probarse y que a la postre sería definitivo. El cántabro rodaría por delante en solitario una vuelta, aunque Hermida terminaría reaccionando y le daría alcance a mitad de carrera.
En el grupo perseguidor seguían produciéndose los descartes siendo el más destacado el de Unai Yus que tenía un enganchón con José Antonio Díaz Arriola, perdiendo sus opciones de podio y encabeza Hermida dejaba a Suárez, virtuales oro y plata.
El pelotón estaba completamente roto y tras los dos candidatos al podio eran Seco y Larrinaga los que más empeño pusieron para intentar cazar, pero se dieron cuenta de que era complicado y por ello que ambos se enzarzaron en un encarnizada pelea en lucha por el bronce que se decanto del lado de Larrinaga. Seco entraba a 19 segundos y quinto, formidable, de menos a más, el madrileño Héctor Guerra, a más de un minuto.
Antes de la prueba elite corrieron los juveniles, en una categoría en la que el cántabro Fernando San Emeterio subía a lo más alto del podio seguido del catalán Josep Nadal y el bronce se lo llevaba el vasco Ion Gómez.
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