Iberdrola planteó el miércoles un plan estratégico para los dos próximos años basado en su apuesta por las energías limpias y las inversiones flexibles que prevé alzas anuales de entre el 5 y el 9 por ciento en Ebitda y en beneficio neto recurrente hasta 2012 y un aumento de la remuneración al accionista.

En un escenario de alzas limitadas de demanda y de precios, la primera eléctrica española centrará su crecimiento en la energía eólica terrestre y marítima, la energía hidráulica, la nuclear, el almacenamiento y captura de CO2 y el desarrollo de redes inteligentes, eficiencia energética y vehículo eléctrico.

Para ello, invertirá 18.000 millones de euros brutos -16.000 millones si se tienen el cuenta las ayudas previstas en Estados Unidos- y destinará un 85 por ciento a negocio regulado (renovables y redes).

La eléctrica señaló, sin embargo, que este gasto se financiará en gran parte con la generación de caja y que se podría adaptar a ésta. Del monto neto total, 9.500 millones de euros están comprometidos y 6.500 millones no lo están, dijo el grupo en una presentación al regulador.

Además, Iberdrola prevé recaudar 2.500 millones de euros con desinversiones de activos no estratégicos.

La eléctrica también se comprometió a mantener un nivel de endeudamiento adecuado con un rating crediticio "A". Iberdrola cerró 2009 con una deuda neta de 29.161 millones de euros, casi 800 millones más que en 2008 y por encima de los 26.000 millones de euros previstos por el grupo.

Iberdrola recordó que de esta cifra, 3.618 millones corresponden al déficit de tarifa -cifra que se le adeuda por vender la electricidad a precios inferiores al coste real-, y la eléctrica prevé recuperar gran parte de este monto a principios de este año cuando se consiga realizar la retrasada subasta o titulización.

A las 12:05 hora local, sus acciones caía un 0,4 por ciento a 5,87 euros, frente a un descenso del 1,3 por ciento del Ibex-35.

RESULTADOS DE 2009 EN LÍNEA

En 2009, el resultado bruto de explotación (Ebitda) de Iberdrola subió un 6,3 por ciento a 6.815 millones de euros mientras que su beneficio neto bajó un 1,25 por ciento a 2.824 millones de euros, unas cifras en línea con el consenso del mercado compilado por Reuters.

"Resultados ampliamente en línea con el consenso a nivel operativo y en la parte baja de la tabla. (...) Neutros a nivel operativo; el negocio liberalizado en España sufrió de la menor demanda y los precios del mercado (...) esto fue compensado por los negocios regulados y la división renovable", dijo BPI en un informe sobre los resultados.

Además de la aportación de Iberdrola Renovables, que la víspera informó de un incremento del 11,8 por ciento en su Ebitda, la primera eléctrica española se benefició de la consolidación de su filial estadounidense Energy East.

El resultado neto de explotación se incrementó un 5,8 por ciento a 4.509 millones de euros al tiempo que las ventas bajaron un 2,5 por ciento a 25.558 millones de euros, según el hecho relevante remitido a la CNMV.