Lourdes Cusó es jefa del grupo de trabajo sobre Consumo Responsable de Intermón Oxfam (IO), y tiene claro que aún hay mucho por hacer en este asunto en España.

En el Día del Consumidor que se celebra hoy, apela a pensar más allá de lo que se compra y hacer un esfuerzo para remontarse a su origen, intentando dañar lo menos posible a la sociedad y el medio ambiente, así como exigir a administraciones y empresas que hagan lo mismo, al tiempo que pide que se deje de comprar por comprar y hacerlo por necesidad, no por moda.

Pregunta.- ¿Cree que la sociedad española práctica un consumo responsable?

Respuesta.- Creo que queda mucho camino por recorrer. Sin embargo, experiencias como la impulsada por Canal Solidario "Consumes o te consumen", en la que hemos participado quince organizaciones no gubernamentales, muestra que hay un interés creciente por este tema en la sociedad y que hay colectivos con muy buenas propuestas.

P.- ¿Qué se hace en IO para promoverlo?

R.- La labor de Intermón Oxfam en el ámbito del consumo responsable se centra en la sensibilización de la sociedad. Con el inicio de la temporada de rebajas, llevamos a cabo la acción "Consume lo justo" para llamar la atención sobre las consecuencias que nuestro exceso de consumo puede tener sobre las personas y el medioambiente. La época de rebajas invita a consumir de forma compulsiva e irracional. Paralelamente, intentamos incidir en empresas y Gobiernos para que se responsabilicen de los compromisos que han alcanzado para luchar contra el cambio climático.

P.- ¿España está preparada, o necesita tiempo y un cambio de mentalidad?

R.- Cambiar los hábitos no es una tarea fácil. Lo estamos viendo en otros ámbitos vinculados con el medioambiente como el reciclaje, la reutilización y la recuperación de residuos. Sin embargo, la respuesta a la acción para frenar el consumo en las rebajas nos hace pensar que hay un gran número de personas preocupadas por este tema.

P.- ¿Qué productos destaca de IO?

R.- Nosotros contamos con tiendas de comercio justo. En ellas, ofrecemos la posibilidad al consumidor de apostar por artículos cuyos productores han gozado de garantías laborales que les permiten llevar una vida digna a ellos y a sus familias. Además, estos productos también cuentan con ciertas garantías medioambientales.

P.- ¿Consumimos más allá de lo necesario y de nuestras posibilidades?

R.- En una sociedad consumista como la que vivimos, difícilmente podemos hablar de un consumo consciente, mesurado y respetuoso con el medioambiente y con otras poblaciones más desfavorecidas. Muchas veces cambiamos de móvil, de coche o de televisor sin que los antiguos hayan dejado de ejercer las funciones para las que los adquirimos. Lo hacemos por moda, por sociabilidad en definitiva, por un impulso consumista, no por una necesidad.

P.- ¿Esto repercute en la polarización mundo desarrollado y mundo en vías de desarrollo?

R.- La sobreexplotación del planeta la llevamos a cabo sobre todo los países ricos y repercute directamente en las poblaciones más desfavorecidas. Los países pobres son los más afectados y sufren cada vez con mayor frecuencia inundaciones, sequías, hambrunas y enfermedades. Y la situación empeorará progresivamente a no ser que los países ricos reaccionen. Un ejemplo: en los países industrializados se consumen 4,5 toneladas de unidades de petróleo por persona y año, mientras que en los países pobres, tan sólo 0,8 toneladas. Sin embargo, la mayoría de materias primas se producen y extraen en los países del Sur.

P.- ¿Qué nos aconseja, qué pautas deberíamos incorporar en nuestra vida consumista para ser responsables?