El Gobierno intenta recabar apoyos para sacar adelante el proyecto de ley de Memoria Histórica en una negociación en la que ERC está "descartada", al no aceptar el Ejecutivo sus exigencias, mientras que IU advierte de que está "encallada" y de las "dificultades" para que cuente con sus votos.

Mientras se estrechan los plazos para que dé tiempo a aprobar el proyecto de ley antes de que se acabe la legislatura, el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, acusó hoy al Gobierno de querer hacer "rebajas" al preacuerdo alcanzado en mayo entre el PSOE e IU-ICV para desbloquear la tramitación de la ley.

Por ello, Llamazares aseguró que el proyecto está "en dificultades" y advirtió de que si finalmente no hay ley será "responsabilidad del Gobierno porque quiere imponer rebajas inaceptables".

En la misma línea, el portavoz de IU, confió, en rueda de prensa, en que el Ejecutivo se avenga a recuperar el pacto alcanzado con su grupo parlamentario "porque no se puede por miedo electoral incumplir compromisos tan importantes".

En declaraciones a EFE, el portavoz parlamentario de ERC, Joan Tardá, fue más allá al acusar al Gobierno de haber descartado a su formación de las negociaciones una vez que los republicanos establecieron como exigencias irrenunciables el reconocimiento jurídico de la condición de víctima y la anulación de los juicios del franquismo.

Tras reconocer que no hablan con el PSOE de este asunto desde "hace meses" y apuntar que las negociaciones siguen con otras fuerzas parlamentarias, en las que CiU -con 10 diputados- juega un papel relevante, Tardá calificó la tramitación de la ley como un "despropósito".

Remarcó además que las negociaciones no se pueden prolongar mucho tiempo ya que los plazos se agotan si se quiere aprobar la ley en esta legislatura.

En estos momentos el proyecto de Ley de Memoria Histórica está pendiente de que se reúna la ponencia encargada de elaborar el informe una vez vistas las enmiendas presentadas, para pasar posteriormente por la Comisión Constitucional, de donde saldrá el dictamen que después será discutido por el pleno.