Público
Público

El juicio por la muerte de Michael Jackson entra en su recta final

EFE

El juicio por la muerte de Michael Jackson entró en su recta final hoy una vez que la Fiscalía terminó con la presentación de su caso contra el doctor Conrad Murray, sobre quien pesa un cargo de homicidio involuntario y podría enfrentarse a una pena de hasta cuatro años de cárcel.

Más de 30 testigos fueron llamados a declarar por la acusación durante las últimas 16 sesiones en la Corte Superior del condado de Los Ángeles, en un intento de demostrar al jurado popular que Murray, de 58 años, cometió una "flagrante negligencia" en el cuidado de Jackson y fue responsable de su fallecimiento por sobredosis.

Se espera que los abogados de la defensa hagan pasar por el estrado a una quincena de testigos, los primeros de los cuales dieron su testimonio hoy y podrían concluir con su exposición del caso para finales de esta semana, por lo que el juicio quedaría listo para los alegatos finales de las partes.

El juicio comenzó el pasado 27 de septiembre y el magistrado Michael Pastor estimó que quedaría visto para sentencia en la última semana de octubre.

No está previsto que Conrad Murray preste testimonio y sus abogados centrarán su estrategia en mejorar la imagen de su cliente y en contrarrestar las declaraciones de los expertos médicos y anestesistas llamados por la acusación, que señalaron al médico como culpable directo de lo sucedido al "rey del pop".

Michael Jackson falleció el 25 de junio de 2009 víctima de una intoxicación aguda de un fármaco de nombre propofol que solía tomar para combatir el insomnio, una medicación considerada inapropiada por los testigos de la Fiscalía, que criticaron con vehemencia la mala praxis del doctor.

El último en declarar, el doctor Steven Shafer, considerado un experto en propofol, llegó a decir que Murray mantenía una relación de empleado - empleador con Michael Jackson, en vez de la requerida médico - paciente, por lo que le administraba al artista lo que le pedía.

La defensa sostiene que fue el propio Jackson quien terminó con su vida al inyectarse propofol en exceso cuando su médico estaba ausente, una posibilidad que Shafer consideró "una locura".

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias