El técnico Paul Le Guen inspiró el renacimiento de la selección de Camerún en la clasificación para el Mundial el año pasado, al mismo tiempo que recuperó su reputación como entrenador.

Su carrera había estado en caída libre, pero tras darle una notoria mejoría al rendimiento de Camerún, el entrenador francés de 46 años vivirá un momento de redención sobre el mayor escenario del fútbol.

Este antiguo centrocampista e internacional francés, terminó sus días como jugador para el equipo regional de Bretaña en un amistoso contra Camerún en 1998.

Su carrera como técnico comenzó en el Stade Rennes y rápidamente se mostró como un entrenador al que le gustaba el talento. El Olympique de Lyon lo contrató como sucesor de Jacques Santini, quien fue nombrado seleccionador francés en 2002.

El Lyon había ganado su primer título de liga gracias a Santini, pero Le Guen los llevó a lograr tres campeonatos más, continuando una carrera que terminó tras lograr un séptimo título consecutivo en 2008.

En ese momento su carrera se había estancado. En el Rangers escocés duró poco más de seis meses tras enfrentarse con el capitán y con los aficionados. Antes de llegar a Escocia había sido aclamado como "el nuevo Arsène Wenger", pero dejó el cargo en medio de las burlas.

Pocas semanas después, estaba trabajando en el Paris St Germain, su antiguo club como jugador, al que ayudó a evitar el descenso en la temporada 2006- 2007. Pero la suerte del equipo no mejoró mucho la temporada siguiente y Le Guen necesitó protección policial para evitar la furia de los aficionados, molestos con los malos resultados del PSG.

A pesar de llegar a la final de la Copa de Francia y ganar la Copa de la Liga de ese país, el PSG decidió despedirle en mayo de 2009.

En julio de ese año firmó un contrato de cinco meses con Camerún y se le encomendó el objetivo de enmendar una floja campaña de clasificación del equipo. Le Guen insistió en traer personal de apoyo y pidió a la federación camerunesa proporcionarle al equipo las instalaciones adecuadas para entrenar.

En una medida que muestra su personalidad, quitó la capitanía a Rigobert Song, líder del equipo desde hacía años, y le entregó la responsabilidad a Samuel Eto'o. La jugada le salió bien y el interista y ex barcelonista anotó goles vitales para garantizar la clasificación de Camerún para el Mundial.

Le Guen firmó una extensión de su contrato para dirigir a Camerún en la Copa del Mundo, pero no es seguro que permanezca en el cargo después del torneo.