La lectura amarga de unas encuestas dulces

El PP vive un momento dulce gracias a las últimas encuestas, que le dan una ventaja media de cuatro puntos sobre los socialistas, pese a los avances judiciales del caso Gürtel. Pero esos datos también permiten una lectura algo más amarga, a la que ayer puso voz el presidente fundador del partido, Manuel Fraga. Preguntado a su llegada al Comité Ejecutivo Nacional sobre los sondeos, el también senador se lamentó de que la distancia no sea "más profunda" dada la situación de la economía española.

"Hay un cambio de tendencia y lo raro es que no sea más profundo porque la situación económica, según todos los testimonios nacionales y extranjeros, está fatal", precisó el dirigente conservador.

Fraga se lamentó de que la distancia en los sondeos no sea más amplia

Con estas palabras, Fraga servía de altavoz de las voces que en el PP no se conforman con que el partido esté sólo cuatro puntos por encima de los socialistas. Creen que ante una coyuntura de crisis económica que califican de "gravísima", algo puede estar haciendo mal el PP para no mantener una ventaja más amplia. "Nuestro mensaje de alternativa al Gobierno no está calando como debería calar en la ciudadanía", se lamenta un veterano diputado.

La misma fuente considera que más allá del rechazo que para la sociedad puedan suponer los escándalos de corrupción que salpican al partido, el problema puede radicar en que "ante la crisis económica, el partido no ha sabido formular una alternativa suficientemente ilusionante". Así las cosas, cree que ha llegado el momento de que Mariano Rajoy haga una reflexión crítica al respecto.

"Nuestro mensaje de alternativa no está calando", se queja un diputado

En un sentido similar, un alto dirigente regional se lamenta de que el PP "no acabe de despegar". "Vamos por encima del PSOE, sí, pero la ventaja no es para cantar victoria, sino para no bajar la guardia", alerta.

Hay también un sector en el partido que prefiere hacer una llamada a la calma y dejar las encuestas "para los sociólogos". "Siempre hay cosas mejorables, pero de ahí a decir que hay que hacer una reflexión hay un abismo", explica un diputado. Este parlamentario añade, además, un matiz a su tesis: "Cuatro puntos por encima de un PSOE que tiene más medios de comunicación afines y más margen de maniobra que nosotros no está del todo mal. Cuatro puntos para el centro-derecha en estas circunstancias, está bien", reflexiona.

El partido confía en que la crisis en el PP valenciano se cierre cuanto antes

En un sentido similar, otro dirigente conservador llama a ser prudentes con los números. No obstante, no oculta que el PP ahora tiene el papel fundamental de saber aprovechar la situación que se le presenta. "Lo que las encuestas muestran es un punto de inflexión social, que a Zapatero se le agota el crédito. Es esto lo que debemos aprovechar". Y recurre a un símil deportivo: "Lo que el PP tiene que hacer ahora es subirse a la ola y surfear lo mejor posible".

Como telón de fondo y vertebrador de este paisaje, aparece el caso Gürtel y la delicada situación que atraviesa el PP de la Comunidad Valenciana. Al respecto existe unanimidad en el partido. Todos los dirigentes conservadores consultados consideran que, pese a que los ciudadanos están más pendientes de la crisis que de lo que ocurre en el PP, Rajoy debe tomar medidas "cuanto antes" por el bien del partido. Una petición que lleva parejo que Francisco Camps ponga orden en los conservadores de la Comunidad Valenciana y corte alguna cabeza.

"Todo el mundo sabe que lo que ha ocurrido en Valencia no son cosas muy presentables ni edificantes, por lo que el partido no puede tardar mucho en reaccionar", señala un alto dirigente.

En este sentido, una diputada considera que la situación ha llegado a un punto tan delicado que "ya no es suficiente con que Mariano pida tranquilidad y Paco [Camps] se escude en que todo va a quedar en nada". "Hay que actuar ya", sentencia.

Otro compañero de partido apunta que, hasta la fecha, "Rajoy sigue teniendo la confianza del PP" pero que "él, que sabe manejar muy bien los plazos, debe saber que la gente en el partido está esperando que sin tardar adopte decisiones ejemplarizantes que sitúen al PP en lo que tiene que hacer, que es hacer oposición y plantear alternativa.