Liberada la sudanesa encarcelada por llevar pantalones

La sudanesa encarcelada por llevar pantalones, algo considerado indecente por un tribunal del país, fue puesta en libertad el martes después de que el sindicato de periodistas pagara la multa de 209 dólares (unos 142 euros) que se le había impuesto, dijo el responsable del órgano mediático.

Lubna Husein fue condenada el lunes por indecencia en un caso que ha generado un clamor en todo el mundo, y fue condenada a pagar una multa o a pasar un mes en la cárcel, pero fue exonerada de una pena más dura de 40 latigazos.

Tras conocer el veredicto, se negó a pagar la multa, y dijo que prefería ir a la cárcel para retar la legitimidad de la ley.

"Vinieron a verme a la cárcel hace unos minutos y me dijeron que me tengo que ir. No tengo idea de por qué. No estoy contenta. Les dije a toda mi familia y amigos que no pagaran la multa", declaró a Reuters. "Pero me han puesto en libertad".

"Tampoco estoy contenta porque aún hay más de 700 mujeres en prisión que no tienen a nadie que les pague sus multas", agregó.

Los simpatizantes de Husein sostienen que en los últimos años miles de mujeres han sido condenadas por ofensas similares según las leyes sobre la decencia islámica y condenadas a ser azotadas. Además afirman que es la primera que ha apelado una sentencia de este tipo.

En julio fue detenida en una fiesta celebrada en la capital, Jartum, junto con otras 12 mujeres, diez de las cuales se declararon culpables de cargos similares y fueron azotadas en julio, ha dicho la antigua periodista.

Ella, sin embargo, se enfrentó a la acusación y argumentó que la prenda "indecente", un par de pantalones verdes amplios que llevó al tribunal, son respetables y no quebrantan la ley.

Husein, que trabajaba para las Naciones Unidas en el momento de su detención, dijo que cree que ha habido presión política para liberarla y acabar así con un caso que ha recibido mucha atención pública.

Mohiedin Titawi, presidente del sindicato de periodistas, dijo que pagaron la multa porque tienen la responsabilidad de "proteger a los periodistas cuando están en prisión". Muchos periodistas consideran que su organización tiene vínculos con el Gobierno.

Muchas activistas consideran la ley sobre la decencia demasiado vaga y que da a los agentes de policía una autoridad indebida para determinar qué ropa es aceptable para las mujeres. El abogado de Husein dijo que van a apelar la sentencia.

La oficina de derechos humanos de la ONU afirmó que la condena viola la legislación internacional.

"El caso de Lubna Husein es en nuestra opinión emblemático de un patrón más amplio de discriminación y de aplicación de leyes discriminatorias contra las mujeres en Sudán", declaró en una rueda de prensa en Ginebra el portavoz de derechos humanos de la ONU Rupert Colville.

Esta oficina saludó posteriormente la puesta en libertad de Husein, pero dijo que no cambiaba su opinión de que no debería haber sido arrestada ni juzgada.

La mujer afirmó que renunció a su puesto en la ONU para no disfrutar de una posible inmunidad legal y seguir así adelante con el caso, retando la legislación.