Los presidentes y jefes de Gobierno de los países de África del sur pidieron hoy a las autoridades electorales de Zimbabue que aceleren la difusión de los resultados de los últimos comicios presidenciales.

Las elecciones generales se celebraron el 29 de marzo, pero sólo se conocen los resultados de los comicios parlamentarios, y ningún dato, ni siquiera parcial, de los presidenciales.

Con el fin de analizar este retraso y las posibles consecuencias regionales, la Comunidad para el Desarrollo de África del Sur (SADC, en inglés) llevó a cabo una cumbre extraordinaria que comenzó el sábado por la tarde y se prolongó hasta esta madrugada.

"La cumbre hace un llamamiento a las autoridades electorales de Zimbabue para que el proceso de verificación y difusión de los resultados sea acelerado de acuerdo con las leyes", dice el comunicado final.

El texto aprobado por representantes de los catorce países de la región pide también que las partes involucradas en este proceso "acepten los resultados que sean anunciados" finalmente por la Comisión Electoral.

Los líderes regionales también pidieron que continúe con su mediación en Zimbabue el presidente sudafricano, Thabo Mbeki, quien el año pasado fue encargado por la SADC para intentar poner de acuerdo al régimen de Robert Mugabe, en el poder desde 1980, y la oposición.

Su mediación logró acercar a las dos partes para que aceptaran participar en las elecciones del 29 de marzo, pero aún quedaron muchos puntos pendientes, algunos de ellos vinculados con reformas constitucionales y con la legislación electoral.

"La cumbre ha pedido al presidente Mbeki que continúe con su papel como mediador en Zimbabue sobre los temas pendientes", dice la declaración.

Mbeki llevó a esta cumbre una de las posiciones más controvertidas, porque horas antes de llegar a Lusaka se reunió con Mugabe en Harare, y al final afirmó que no pensaba que hubiera crisis política en ese país.

"La situación es normal y yo no la tildaría de crisis. Tenemos que esperar que la Comisión Electoral de Zimbabue dé a conocer los resultados", dijo Mbeki a los periodistas.

En la cumbre que se cerró esta madrugada estuvo ausente Mugabe, quien estuvo representado por una delegación integrada por cuatro ministros. Sí fue invitado a participar el líder de la oposición, Morgan Tsvangirai.

Tsvangirai, líder del Movimiento para el Cambio Democrático (MDC), se ha atribuido la victoria en las elecciones parlamentarias, con el 50,3 por ciento de los votos. Según sus datos, Mugabe obtuvo el 43,8 por ciento de los sufragios.

El partido de Mugabe, ZANU-PF, ha pedido un recuento general de los votos depositados el 29 de marzo, pero las autoridades sólo han aceptado revisar el escrutinio en 23 de las 207 circunscripciones en las que se votó ese día.

Así lo informa hoy desde Harare el dominical "Sunday Mail", controlado por el Gobierno, que sostiene que la revisión se hará a partir de las 22 quejas presentadas por ZANU-PF y otra del MDC.

Los votos de las 23 zonas electorales que serán recontados corresponden a los comicios presidenciales y parlamentarios. El recuento se hará el próximo sábado, afirmó en una entrevista con el periódico el presidente de la Comisión Electoral, George Chiweshe.

"Todos los votos de cada circunscripción serán recontados a parque de las quejas presentadas", agregó.

Según Chiweshe, hay dudas "razonables" para creer que en esos lugares los sufragios fueron contados erróneamente, lo que puede afectar a los resultados de los comicios.

En los comicios parlamentarios, cuyos resultados ya se conocen, el partido gobernante obtuvo 97 diputados y la oposición, 99. También hubo un legislador independiente. En el Senado, Gobierno y oposición se repartieron a partes iguales los 60 escaños.

El MDC, cansado de esperar los resultados, presentó una solicitud ante la Justicia zimbabuense para que fuerce a la Comisión Electoral a difundir los datos del escrutinio.