Este artículo se publicó hace 14 años.
Lieberman visita España en un contexto de creciente aislamiento de Israel
El ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Avigdor Lieberman, inicia este miércoles su primera visita oficial a España en un contexto de creciente aislamiento político y diplomático de su país en la escena internacional.
El proceso se inició con la ofensiva militar israelí del año pasado en Gaza, que costo la vida a 1.400 palestinos, en su mayoría civiles, y desde entonces Israel no ha dejado de perder apoyos y ganar críticas en el seno de la comunidad de naciones.
El liderazgo israelí durante la ofensiva continua bajo la amenaza de comparecer como acusado ante el Tribunal de Justicia de la Haya por crímenes de guerra en la franja palestina, una iniciativa que impulsan en la ONU los países árabes e islámicos.
También los crímenes de guerra en Gaza son la causa de que la entonces ministra de Exteriores y ahora líder de la oposición israelí, Tzipi Livni, no pueda viajar al Reino Unido, donde se ha cursado en su contra una orden judicial de detención.
La intransigencia del actual gobierno del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ante las reivindicaciones nacionales palestinas desató a continuación una grave crisis con la administración del presidente norteamericano, Barak Obama.
Se trata de una crisis que no tiene precedentes desde hace décadas entre Israel y EEUU, su principal aliado en el mundo.
Y de una crisis que sigue abierta y con resultado incierto.
Las consecuencias en el plano bilateral del rechazo de Netanyahu a la exigencia de Obama de frenar la colonización en suelo palestino están por conocer pero ya preocupan a la prensa local, que recuerda que la ayuda anual de EEUU a Israel es de 3.000 millones de dólares.
El asesinato en enero en Dubai del dirigente de Hamas Abdel Rauf al Mabhuh por presuntos agentes del Mossad que portaban pasaportes británicos falsos ha enfrentado por último al Estado judío con la Unión Europea (UE), que condenó el crimen en un duro comunicado.
Y le ha enfrentado en particular con el Reino Unido, que expulsó al jefe de los servicios de inteligencia israelíes en Londres.
En declaraciones a Efe, el portavoz del ministerio israelí de Exteriores, Igal Palmor, negó que la concatenación de denuncias, desencuentros y acusaciones haya llevado a Israel al "aislamiento" pero admitió que su país afronta "interrogantes" y "tensiones".
Y dijo que "la visita a España es para nosotros muy importante".
"Además de la relación bilateral, que valoramos mucho, España ocupa en la actualidad la presidencia de la UE y durante la visita de Lieberman puede surgir ideas para dinamizar nuestras relaciones con los vecinos árabes y los países europeos", apuntó.
Palmor se refirió al proyecto de establecer en Barcelona el secretariado permanente de la Unión por el Mediterraneo.
Asimismo aludió a la negociación con los palestinos, y aunque descartó que España vaya a tomar el relevo de EEUU para reactivarla, subrayó que "es algo en lo que lleva mucho tiempo involucrado el ministro español de Exteriores, Miguel Angel Moratinos".
Lieberman -cuya agenda en Madrid, donde pasará tres días, no ha sido divulgada-, representa la línea más dura del gabinete de Netanyahu, que cuenta con el respaldo de la mayoría parlamentaria más extremista en los 62 años de existencia del Estado judío.
El ejecutivo israelí está sostenido por una coalición de partidos conservadores, religiosos y laboristas, aparte de la formación que lidera Lieberman, el ultraderechista y xenófobo Israel Beitenu, que encarna en la actual mayoría las posiciones mas radicales.
El jefe de la diplomacia israelí defiende en su discurso que la creación de un estado palestino independiente "no es realista", y ha llegado a proponer públicamente la deportación a los territorios ocupados de la población árabe con ciudadanía israelí.
Y se trata de un colono; Lieberman vive junto a su familia en el asentamiento de Nokdim, junto a Belen, en la Cisjordania ocupada.
El Gobierno español también había invitado a Netanyahu para que visitará este mes Madrid con motivo del viaje que el primer ministro israelí tenía previsto hacer a Washington para asistir a la cumbre nuclear celebrada la pasada semana en la capital federal.
Pero la escala en Madrid se cayó del programa cuando Netanyahu anuló en el último momento su viaje a Washington, de acuerdo con la prensa para evitar la cita con Obama y eludir preguntas incomodas sobre el arsenal atómico de Israel, que es un secreto a voces.
Según los expertos, Israel dispone de al menos 200 cabezas nucleares y es el único país con ese tipo de armas en Oriente Medio.
El Estado judío niega, no obstante, la posesión de armamento atómico, lo que tampoco sirve de auxilio para romper un aislamiento creciente y que ha acercado al moderno Israel a un grado de cuestionamiento solo comparable al que generó su propia creación.
Esto es, le ha aproximado a sus horas más bajas.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.