López Aguilar acusa al PP de promover la abstención

"Especulación, corrupción e impunidad". Esta es la trinidad por la que, según los socialistas, se guía el PP. Así lo afirmó ayer Juan Fernando López Aguilar, quien acusó a la derecha de "refocilarse y jalear los asuntos de su propia corrupción porque sabe que eso desmotiva la participación" en las elecciones. Por eso, según dijo durante una comida con militantes en Zaragoza, "se envalentonan y son cada vez más bravucones".

Los presuntos casos de corrupción y abuso de poder parecen haberse instalado definitivamente como el principal elemento de controversia de la campaña del 7-J. Horas antes, en una entrevista en Antena 3, López Aguilar defendió como un "comportamiento correcto" que Rodríguez Zapatero, dada su condición de presidente del Gobierno, utilizara un avión militar para desplazarse a un mitin del PSOE, y acusó al PP de fabricar acusaciones contra el Ejecutivo para "ocultar la gigantesca trama de asuntos de corrupción que le afectan y de los que no ofrecen ninguna explicación y mucho menos asumen ninguna responsabilidad".

Denuncia que el PP jalea la corrupción para desmotivar al electorado

Movilización

Si para el cabeza de lista del PSOE la campaña del PP es "deliberadamente desmotivadora" y por ello alimenta "la política de baja calidad", la suya tiene como objetivo primordial movilizar a su electorado. "No podemos permitir que las ideas que no son mayoritarias en la sociedad lo sean por incomparecencia de los nuestros", advirtió en una arenga dirigida a los suyos. Con el mismo propósito, el presidente de Aragón, Marcelino Iglesias, que ofició de anfitrión, afirmó que "es tan importante para nosotros ganar las elecciones europeas como lo fue ganar las elecciones generales". López Aguilar apeló a la necesidad de "preservar con el voto" el modelo social europeo "que nos ha hecho mejores", porque es algo que "no cae del cielo" y está "más amenazado que nunca". En este sentido, afirmó que su cara a cara en TVE con el cabeza de lista del PP, Jaime Mayor Oreja, permitió corroborar que la derecha no sólo tiene "una visión restrictiva de los derechos y libertades", sino que también siente "desprecio por la política y por los más débiles".

El candidato afirmó que "el señor Mayor", según la expresión acuñada para subrayar que el candidato del PP representa el pasado, "habló mal de España". A su juicio, fue así "porque no cree en ella y la ve como un país triste, sórdido y en decadencia". "Parece tener la nostalgia de que cualquier tiempo pasado fue mejor, no sé si nostalgia de los tiempos de Aznar o de más atrás", agregó en alusión a sus comentarios conciliadores con la dictadura de Franco.

López Aguilar asegura que Mayor Oreja habló

Zapatero, que está teniendo una presencia irregular en la campaña para disgusto de los dirigentes de los territorios que no pisará, como Baleares donde el Gobierno de Francesc Antich pende de un hilo y Galicia donde la derrota está aún muy reciente, volverá hoy al tablado electoral con un mitin en Asturias.