El consejo de administración del Real Zaragoza ha acordado esta noche nombrar a Manolo Villanova, hasta ahora técnico de la Sociedad Deportiva Huesca, del Grupo II de la Segunda División B, como nuevo entrenador del equipo, en sustitución de Javier Irureta, que hoy presentó su dimisión.

El presidente del club, Eduardo Bandrés, dijo a los medios de comunicación, en una breve comparecencia, que Villanueva, de 64 años, llega al club con un gran optimismo y con confianza en la capacidad de los jugadores para revertir una situación de "crisis".

Bandrés recordó que Villanueva, que ya ha sido preparador del Real Zaragoza en otras dos ocasiones, es un gran zaragocista y un profesional vinculado al club desde hace muchos años, que ni siquiera ha preguntado por las condiciones de su contratación.

El club afronta esta situación con preocupación pero también "con responsabilidad" y "esperanza", añadió el presidente, quien señaló que el equipo está "muy vivo" y que en ningún caso va a tirar nada por la borda, porque aún queda por disputar el 31 por ciento de los puntos en juego en esta Liga.

La principal preocupación es elevar el estado anímico de los jugadores, ya que son ellos los que tienen que sacar adelante esta situación, que ha dejado al equipo en el puesto número 17 de la clasificación de la Liga.

Bandrés, quien agradeció el apoyo de la afición y la animó que sigan con el equipo, añadió que se hablará con los jugadores porque su nivel de exigencia y compromiso debe ser mayor.

El presidente agradeció el esfuerzo de Irureta y su gesto de honestidad, al dimitir hoy como entrenador del club, porque no suele ser muy frecuente.

"Cuando uno no se siente con fuerzas y animo para sacar una empresa adelante es bueno reconocerlo", declaró el Bandrés, quien agradeció a la S.D. Huesca que haya facilitado la salida de Villanueva al entender que se trataba de una situación de necesidad y al ser una buena oportunidad para el técnico.