El entrenador del club de Dubai Al Wasl, el exjugador argentino Diego Armando Maradona, no viajará mañana a Nápoles como se había anunciado ya que se aplazó la vista a la que iba asistir por la causa por sus problemas con el Fisco italiano.

Así lo anunció hoy el abogado del "Pibe de Oro", Angelo Pisani, quien aseguró que Maradona deseaba "fuertemente" volver a Nápoles para aclarar al mundo entero que no ha sido nunca un evasor fiscal".

Pisani explicó que mañana se iba a celebrar una audiencia sobre el recurso presentado por Maradona para demostrar su inocencia y "la persecución que ya dura 25 años", pero se ha aplazado porque el "presidente de la comisión provincial tributaria ha fijado una nueva vista para decidir sobre la formación de un nuevo tribunal".

El fisco italiano reclama unos 40 millones de euros a Maradona, debido a la falta de pago del impuesto de las personas físicas IRPF durante la segunda mitad de la década de los años 80, cuando jugaba en Nápoles.

Una cantidad que aumenta diariamente tres mil euros sólo en intereses.

Pero Maradona ha siempre alegado que nunca le fue comunicado la petición del pago de estos impuestos, y que se trata de un error por parte de Equitalia, la sociedad pública que se ocupa de recaudar los impagos fiscales.

En el intento de recuperar la deuda que le reclama, la Guardia de Finanzas italiana ya confiscó a Maradona unos pendientes que llevaba puestos mientras se encontraba en un centro de adelgazamiento del norte de Italia, que fueron subastados en 2010 por 25.000 euros.

En 2006, aprovechando otra visita del astro del fútbol argentino a Italia, se le confiscó un reloj Rolex valorado en 11.000 euros.

El abogado de Maradona también anunció que el astro argentino quiere volver a pisar territorio italiano para asistir el 20 de mayo a la final de la Copa de Italia entre el Nápoles y el Juventus de Turín.