El ex futbolista argentino Diego Armando Maradona y el director serbiobosnio Emir Kusturica subieron esta noche las escaleras del Palacio de los Festivales de Cannes para asistir al estreno de "Maradona by Kusturica", rodeados de fotógrafos, cámaras y admiradores.

"Uno de los más bellos momentos" de este 61 Festival, según el presentador que sigue de principio a fin todas las ascensiones por las escalinatas para la cadena de televisión del certamen.

Sonrientes, agarrados del hombro o simplemente juntos, las dos estrellas internacionales del fútbol y del cine protagonizaron un sonado paseo de medianoche, antes de que sus respectivas familias se uniesen a ellos sobre el tapiz rojo.

Visiblemente inspirado y feliz, del brazo de sus dos hijas, Dalma y Gianinna, elegantísimas, tradición obliga; el "Pibe de Oro" trajeado y con corbata, y su esposa, vestida de largo, subieron las escaleras del Festival de Cannes, junto al equipo del filme de Emir Kusturica.

En ese trance hubo de todo, música balcánica, "Olé, olé, olé", camisetas de la selección argentina -en lugar del obligado esmoquin para los caballeros y el traje de noche para las damas-, y hasta un balón sobre las escaleras, que comenzó a circular de pie en pie.

Hasta llegar a los del mago del balón y de su amigo Kusturica, quienes jugaron unos instantes con él, para mayor alegría de fotógrafos y cámaras.

Excepcionalmente, les esperaba en el interior del Gran Teatro Lumière, para presentarles personalmente, y muy contento de hacerlo, el delegado general del Festival, Thierry Frémeaux.

Como esta noche se va a "hablar mucho de argentinos", Frémaux presentó a la asistencia a algunos de los presentes, entre ellos el director Pablo Trapero y su esposa y actriz, Martina Gusman, protagonista de "Leonera", filme con el que compiten por la Palma de Oro.