Público
Público

Montoro abrió la mano a la inversión pública antes de las elecciones europeas

VICENTE CLAVERO

La licitación de obras públicas por parte de la Administración central del Estado ascendió a 2.580 millones de euros durante los cuatro primeros meses del año; es decir, justo antes de la celebración de las pasadas elecciones europeas. Eso supone una subida del 166% respecto al mismo periodo de 2013, cuando estaban en su apogeo los recortes presupuestarios impuestos por el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, para ajustar el déficit a las exigencias de la Troika.

El mayor aumento relativo se lo anotó la inversión destinada a carreteras, que es tradicionalmente una de las más perceptibles por los ciudadanos. En el último ejercicio, el Gobierno sólo gastó 494.000 euros en el mantenimiento y ampliación de la red dependiente del Estado. Entre enero y abril de 2014, sin embargo, la cifra fue más de mil veces superior, hasta alcanzar los 610 millones, según datos facilitados por la patronal de las grandes constructoras (Seopan).

De todas formas, la parte del león de las licitaciones la absorbió el AVE, un servicio ferroviario de gran lucimiento político, al que se destinaron 1.387 millones de euros, exactamente la mitad de toda la inversión pública estatal. Las infraestructuras de alta velocidad dependen de ADIF, sociedad integrada en el Ministerio de Fomento y que sólo dispuso de 413 millones en los cuatro primeros meses de 2013, con lo que su presupuesto se ha multiplicado ahora por tres.

También las comunidades y los ayuntamientos licitaron más obras públicas hasta abril, coincidiendo con el inicio de la cuenta atrás de las próximas elecciones autonómicas y municipales, previstas para mayo de 2015. Los gobiernos regionales comprometieron 710 millones de euros, cifra un 28,4% superior a la del año pasado; mientras que en el caso de las corporaciones locales el incremento fue del 88,3%, al pasar de 608 a 1.146 millones.

El conjunto de las administraciones públicas invirtieron 4.437 millones de euros en los cuatro primeros meses, más del doble que en 2013. Después de las carreteras y del ferrocarril, la partida que más dinero atrajo fue la correspondiente a edificaciones docentes, sanitarias y deportivas, con 540 millones y una mejora del 38%; seguidas de las obras hidráulicas (540 millones) y de urbanización (509).

En el ránking de comunidades por volumen invertido en ellas, ocupó el primer lugar Andalucía, que entre enero y abril recibió del total de las administraciones públicas 490 millones de euros. El segundo puesto fue para Catalunya, con 781 millones. Sin embargo, los mayores crecimientos se produjeron en Madrid (193%) y en Baleares (179%), ambas gobernadas por el PP.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias