La morosidad llega al 4% por primera vez desde 1997

La bajada del Euríbor era la esperanza. Las entidades financieras, y sobre todo los ciudadanos, confiaban en poder evitar la morosidad si las cuotas de las hipotecas se abarataban lo suficiente. La realidad no les ha dado la razón.

El desahogo para los bolsillos de muchos hogares está siendo muy importante, pero la llegada del paro está impidiendo a otros muchos pagar sus créditos. Si a ello se une el cierre o la entrada en concurso de acreedores de numerosas empresas, el resultado es que la morosidad crediticia que soportan bancos y cajas sigue creciendo de forma desmesurada.

Al cierre de febrero, los créditos impagados ascendían a 77.653 millones de euros (casi 6.000 millones más que el mes anterior), lo que supone una tasa de mora del 4,18%. Desde principios de 1997 no se había superado la cota del 4%, aunque entonces, esa cifra se alcanzó con 13.000 millones de morosidad. En el incumplimiento de pagos, las cajas siguen sufriendo un mayor castigo que los bancos. Su tasa de mora se sitúa ya en el 4,84%, mientras que la de ellos está en el 3,45%.

Para hacer frente a estos impagos, las entidades financieras españolas cuentan con una hucha de provisiones, pero ésta ya ni siquiera cubre la totalidad de los impagados. La tasa de cobertura (provisiones sobre dudosos) ha caído a una tercera parte en sólo 12 meses.

Hace un año, las cajas tenían una tasa de cobertura del 173% y ahora ha bajado al 50%. Eso significa que antes tenían 1,73 euros ahorrados por cada euro de impagados, mientras que ahora sólo tienen medio euro. Los bancos están algo más holgados y todavía mantienen una tasa del 69%, pero en su caso la caída ha sido mayor porque hace un año tenían 2,1 euros guardados por cada euro de mora.

En el sector aseguran que estas tasas de cobertura no son tan brillantes como las del pasado pero mantienen que son suficientes porque la mayor parte de los morosos acaba recuperándose.