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Al menos quince personas murieron este domingo al estrellarse un helicóptero ruso Mi-8 en el aeropuerto de la ciudad meridional afgana de Kandahar, informó la Agencia Federal de Transporte Aéreo de Rusia (Rosaviatsia).

'El helicóptero de transporte se estrelló al despegar en el aeródromo de Kandahar. Quince de los diecisiete pasajeros han muerto', señala la fuente, citada por la agencia rusa Interfax.

En el aparato, uno de los más usados del mundo, viajaban 20 ocupantes, tres tripulantes y diecisiete pasajeros.

'Todos las personas que viajaban en el helicópteros han sido hospitalizadas', añadió.

Se desconoce la nacionalidad de los ocupantes del helicóptero.

En un comunicado, la Fuerza de Asistencia para la Seguridad (ISAF) dijo que hay 'cinco bajas adicionales cuya condición está por confirmar'.

La fuerza internacional subrayó en su nota que el aparato siniestrado era un helicóptero 'civil' que operaba en Afganistán 'bajo contrato'.

También puntualizó que entre las bajas no hay 'personal militar'.

Aunque aún se ignoran las causas por las que el helicóptero se estrelló, la ISAF dijo que 'se ha descartado una acción insurgente'.

Actualmente, el Reino Unido arrienda helicópteros rusos y ucranianos Mi-8, Mi-6 y Mi-26 para el transporte de tropas y mercancías en Afganistán.

La Agencia anunció la creación de una comisión de investigación que integrará a miembros de la administración del aeropuerto de Kandahar y representantes rusos del sector de aviación.

Kandahar acoge la base aérea más importante de la coalición liderada por Estados Unidos en el sur del país.

El pasado 14 de julio seis civiles ucranianos y un niño afgano murieron cuando el helicóptero Mi-6 en el que viajaban fue derribado por los talibanes en la provincia afgana meridional de Helmand.