El centrocampista de la selección de fútbol de Nigeria Sani Kaita ha recibido numerosas amenazas de muerte desde su país tras ser expulsado en el partido que su selección perdió el jueves 2-1 ante Grecia, en un partido del Grupo B del Mundial.

"Hasta ahora, Kaita ha recibido más de 1.000 amenazas en su correo electrónico desde Nigeria", dijo el portavoz del equipo, Peterside Idah.

"Estamos tomando estas amenazas muy seriamente. Hemos hablado con el Gobierno de Nigeria para informarle al respecto y también hemos escrito a la FIFA para que lo tenga en cuenta", dijo Idah a Reuters, en una entrevista telefónica desde el centro de concentración de Nigeria, 200 kilómetros al norte de Durban.

Nigeria ganaba por un gol en el encuentro del jueves cuando Kaita realizó una entrada en el borde del área sobre el griego Vassillis Torosidis a los 33 minutos que le costó la expulsión del partido.

Tras la expulsión, el equipo africano se vio desconcentrado y permitió que su rival remontara el marcador, complicando sus posibilidades de clasificación a la siguiente fase del torneo que se disputa en Sudáfrica.

"Lo consideramos algo muy grave ya que se trata de un joven que está dando lo mejor de sí mismo al servicio de su país y del fútbol", dijo Idah.

"El equipo ha recibido las amenazas contra su vida con sorpresa y decepción y está pidiendo a las autoridades de Nigeria que adopten medidas para protegerle".

Según Idah, el jugador estaba "tremendamente afectado, pero afortunadamente está recibiendo un gran apoyo de sus compañeros y de todos los integrantes del equipo".

Nigeria se enfrentará el martes a Corea del Sur en el estadio Moses Mabhida de Durban y debe ganar para tener alguna posibilidad de clasificarse a octavos de final.

El portavoz del equipo dijo que los defensas Taye Taiwo y Elderson Echiejile, que sufrieron sendos golpes en el encuentro contra Grecia, estaban teniendo una "buena recuperación" y podrían estar disponibles de cara al último partido de la fase de grupos.