La ONU confirma la muerte de 60 civiles en un ataque de la guerrilla ruandesa al este del Congo

Al menos 60 civiles resultaron muertos y 11 gravemente heridos en un ataque de la guerrilla hutu de las Fuerzas Democráticas para la liberación de Ruanda (FDLR) contra el poblado de Busurungi, en la provincia oriental congolesa de Kivu Norte, confirmó hoy la emisora Radio Okapi, que cita fuentes de la ONU.

La emisora, que recoge unas declaraciones de Leila Zerougui, representante especial adjunta de Naciones Unidas en la República Democrática del Congo (RDC), señala que un equipo de la ONU se encuentra en la zona para verificar el número exacto de muertos, tras haber procedido a la evacuación de los heridos.

La responsable de la ONU en el Congo también indicó que muchos de los habitantes de las aldeas del área de Walikale, donde se encuentra Busurungui, han huido de sus aldeas.

Zerougui, según Radio Okapi, emisora patrocinada por la ONU, también señala que la Misión de Naciones Unidas en el Congo (MONUC), también ha identificado las áreas con riesgo de nuevos ataques de las FDLR, que deberán proteger los "cascos azules".

Previamente, supervivientes huidos de Busurungi habían señalado que numerosos miembros de las FDLR atacaron el pasado fin de semana la localidad, incendiaron las viviendas y asesinaron a 62 personas, al tiempo que violaron a algunas mujeres y saquearon la aldea, según la emisora.

La organización humanitaria Oxfam ha advertido que la ampliación de las operaciones de lucha contra el FDLR en Kivu Sur, por parte de las Fuerzas Armadas Congoleñas (FARDC) con apoyo de la MONUC, puede causar más muertes de civiles y desplazamientos en el este del Congo.

"El apoyo que las Naciones Unidas está dando a las operaciones militares del Gobierno congolés contra los rebeldes en la zona de Kivu Sur puede provocar la muerte de miles de civiles e intensificar el sufrimiento en la zona", señaló recientemente Oxfam.

Para Oxfam, "es necesario detener los abusos cometidos por los rebeldes armados, pero la solución no puede implicar más sufrimiento para las comunidades congoleñas".

La organización pide que se castiguen tanto a los componentes de las FDLR como de los militares congoleños que han cometido delitos y que hasta ahora, "han permanecido impunes" y reclama a la MONUC "unas condiciones bien claras" para proseguir con su apoyo a las FARDC.

Recuerda Oxfam que 250.000 personas tuvieron que huir de sus hogares en Kivu Norte debido a la ofensiva conjunta de las tropas congoleñas y ruandesas contra las FDLR en esa región en enero pasado, cuando se produjo un gran número de muertes de civiles.

Aún antes de iniciarse la ofensiva contra las FDLR en Kivu Sur, ya han huido de sus casas unos 100.000 civiles en esa provincia, según Oxfam, que calcula que un total de 400.000 personas podrían verse desplazadas de sus lugares de origen una vez que comiencen los combate en la provincia.

Las FDLR se formaron en el este del Congo por hutus huidos de Ruanda y a los que se responsabiliza del genocidio ruandés de 1994, en el que unas 800.000 personas, tutsis y hutus moderados, fueron asesinadas en ese país, según cifras de la ONU.