El Real Madrid volvió a los entrenamientos tras dos días de descanso, en una sesión que estuvo marcada por la incorporación al grupo del portugués Pepe Kléper después del permiso vacacional por haber disputado el Mundial y, por el partidillo que los futbolistas de la primera plantilla disputaron frente a algunos del filial.

Pepe se ejercitó por primera vez a las ordenes del nuevo entrenador del Real Madrid, José Mourinho, después de haber gozado de algunos días más de descanso que sus compañeros y se le pudo ver algo falto de ritmo pero en perfecta forma física.

La incorporación de Pepe fue la principal novedad del último entrenamiento matutino del Real Madrid antes de partir a Estados Unidos mañana para continuar con la pretemporada, en una jornada que también se caracterizó por el trabajo táctico que Mourinho quiso imprimir a sus jugadores.

Para finalizar el entrenamiento, Mourinho dividió a sus jugadores y dispuso un partidillo a lo ancho del terreno de juego entre integrantes del primer equipo y jugadores del filial.

Por un lado jugaron Adán, Pedro León, Pepe, Garay, Marcelo, Diarra, Granero y Benzema, y por el otro Dudek, Drenthe y los canteranos Tébar, Alex, Morata, Juanfran, Nacho Fernández y Joselu. Lass Diarra y Fernando Gago también disputaron el partidillo, aunque Mourinho les entregó un peto amarillo para que hicieran de comodín con ambos equipos en jugadas ofensivas.

Uno de los jugadores más destacados fue el francés Karim Benzema que dejó patente su calidad con dos goles de bella factura, mientras que el episodio desagradable estuvo en el codazo involuntario que Pedro León propició a su compañero Royston Drenthe, pero que no tuvo consecuencias negativas.