El presidente israelí, Simón Peres, afirmó hoy en El Cairo que su país dejará de instalar nuevos asentamientos en territorios palestinos ocupados y desmantelará los que hayan sido levantados sin autorización en el mismo momento en que se reanude el diálogo con los palestinos.

Peres reiteró la postura oficial israelí en declaraciones a la prensa tras reunirse hoy con su colega egipcio, Hosni Mubarak, en una entrevista que permitió revisar el estancado proceso de paz en Oriente Medio.

"El Gobierno israelí ha dicho lo siguiente: en el minuto en que comencemos a negociar no habrá nuevos asentamientos, no habrá confiscaciones de tierra, no habrá inversiones para nuevos asentamientos y serán desmantelados los asentamientos que fueron establecidos sin autorización", aseguró Peres en la capital egipcia.

En sus declaraciones, el presidente israelí, sin funciones ejecutivas en la Administración de su país, insistió en que Israel "tiene la voluntad y está dispuesto" a llegar a una solución de dos Estados, el israelí y el palestino.

Explicó en que se pueden resolver todos los problemas pendientes, aunque sean graves, incluido el estatus de Jerusalén. Al respecto expresó que "cualquiera puede proponer cambios" y estos cambios se pueden llevar a las negociaciones.

Por su parte, Mubarak, que estaba sentado al lado de Peres, recordó la postura de los países árabes de que antes de reanudar las negociaciones de paz se debe cesar la construcción de asentamientos en los territorios palestinos ocupados por Israel, "incluido Jerusalén Este".

Mubarak abogó por llegar a una solución definitiva en el conflicto entre israelíes y palestinos respetando la fronteras anteriores a la guerra de 1967.