Público
Público

Los piratas somalíes disfrutan del dinero, sin dejar rastro

Reuters

Por Mark Trevelyan

Las decenas de millones de dólares extorsionados a los propietarios de barcos por los piratas somalíes no son detectados o interceptados porque se cuelan en la economía de un país en el que no hay ni un gobierno ni una policía que funcionen como tal.

Las bandas criminales internacionales normalmente tiene que "lavar" sus ganancias a través del sistema financiero para que parezcan fondos legítimos, dejando un rastro que los vuelve vulnerables.

Pero los expertos financieros dicen que este no es el caso en Somalia, un claro ejemplo de "estado fallido" en el que no hay una autoridad central fuerte ni un sistema bancario formal y que vive inmerso en una guerra civil desde hace casi dos décadas.

Los piratas que el fin de semana pasado capturaron el petrolero saudí Sirius Star y su carga de crudo valorada en 100 millones de dólares en el mayor secuestro marino de la historia, ya habían conseguido decenas de millones en efectivo este año por otros abordajes.

"Viven como monarcas, como reyes. Lo hacen todo en público, sin necesidad de esconder ni disimular el origen del dinero", dijo Hany Aby El Fotuh, un banquero egipcio especialista en blanqueo de dinero.

"El dinero está ahí, grandes cantidades en efectivo. Al gobierno local no le importa, ni tiene la autoridad para oponerse o controlarlo (...) Todos los acuerdos sucios se pagan en efectivo", agregó, refiriéndose a la compra de armas, equipos de comunicaciones, lanchas motoras y otro material.

"No necesitan lavar el dinero, porque no hay un estado de derecho, no hay un sistema bancario, ¿así que por qué siquiera pensar en lavar el dinero?", añadió.

'BOOM' ECONÓMICO POR LOS RESCATES

La actividad de los piratas se ha convertido en una industria pequeña pero rentable en uno de los países más pobres del mundo.

"A parte de los que participan en las operaciones, que pasan de 1.000, están los que proporcionan servicios desde las negociaciones con los propietarios de los barcos, la entrega de armas, la formación de los piratas, la recopilación de información, la logística, etc", explicó Ismail Ahmed, un británico con 20 años de experiencia en cuestiones financieras y de desarrollo en Somalia.

"Algunos invierten en tierras y propiedades en sus pueblos, donde saben que no serán perseguidos", agregó. "El dinero de los rescates acaba llegando a mucha gente en los pueblos. Esta es una de las razones por las que la gente local los apoya".

Michael Weinstein, un experto en Somalia en la Universidad de Purdue, en Estados Unidos, atribuyó la escalada en los abordajes piratas al hundimiento de la economía local en la región de Puntlandia.

"La administración allí está plagada de funcionarios corruptos que mantienen lazos con los piratas", afirmó.

El Gobierno no tiene dinero para pagar a los soldados y la economía está asediada por la hiperinflación ante la masiva emisión de chelines somalíes, añadió. Además, la economía local funciona ahora en dólares, y los chelines solo se usan para operaciones pequeñas, indicó Ahmed.

Según los expertos, aunque los piratas pueden tener el apoyo tácito del principal grupo islamista del país, Al Shabaab, sus motivos son los beneficios, no el terrorismo, y no hay pruebas de que estén relacionados con Al Qaeda.

Sin embargo, Al Qaeda, que ha realizado al menos dos ataques importantes en el mar, podría mirar este asunto con interés. Un simpatizante integrista escribió un mensaje esta semana en unos foros de Internet controlados por el estadounidense SITE Intelligence Group que la crisis está llevando navíos occidentales a mares donde podrían ser objetivo de ataques de Al Qaeda.

"Los enemigos de Al Qaeda (...) tragarán el cebo y vendrán a una zona en la que Al Qaeda ha tejido su telaraña", escribió. "Al Qaeda saldrá cuentas con América y sus aliados golpeando sus barcos o hundiéndoles".

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias