La Policía israelí ha establecido un comando especial dedicado a preparar la evacuación forzosa en un solo día de numerosos mini-asentamientos judíos en Cisjordania, informa hoy el diario "Haaretz".

El rotativo, que ayer desveló la existencia de un plan de evacuación en las Fuerzas Armadas, precisa que el comando policial no existe ni funciona todavía de forma oficial porque el Gobierno aún no ha ordenado formalmente la preparación de las evacuaciones.

El portavoz de la Policía, Miki Rosenfeld, desmintió la creación de un nuevo comando y remitió a un "pelotón" que ya existía y está "encargado de controlar los disturbios tanto en los seis distritos del país como en Judea y Samaria", nombres oficiales y bíblicos para Cisjordania.

En cualquier caso, los colonos ya han creado su propio "contra-comando" para resistir a la eventual evacuación, que supondría el cumplimiento parcial por Israel de una de sus obligaciones en el marco de la primera fase de la Hoja de Ruta, el plan de paz lanzado en 2003 por el Cuarteto de Madrid (EEUU, la UE, la ONU y Rusia).

La nueva unidad está encuadrada en la Policía del distrito de Shai (responsable del territorio palestino ocupado de Cisjordania) y liderada por el jefe de la Policía de Fronteras en la zona, el brigadier general Amitai Levy.

El comando está inspirado en los creados en las fuerzas de seguridad israelíes en la franja de Gaza y el norte de Cisjordania antes del Plan de Desconexión de 2005.

Hace dos semanas, la Policía de Fronteras, la Policía y el Ejército llevaron a cabo un ejercicio conjunto de evacuación y manejo de las violentas protestas de colonos que previsiblemente provocaría, según el rotativo.

Dichos cuerpos desmantelarían por la fuerza en un solo día 23 proto-asentamientos establecidos por colonos judíos en territorio palestino después de 2001, que son los que Israel reconoce como ilegales (para la comunidad internacional, todos lo son) y que absorben una mínima parte del total de colonos.

Los analistas interpretan la noticia como una concesión de Israel a la comunidad internacional -y en particular a su principal aliado, EEUU- ante el reciente aumento de las críticas contra el Gobierno de Benjamín Netanyahu por su negativa a frenar la expansión de asentamientos.

Ayer, el viceministro israelí de Asuntos Exteriores, Dani Ayalón, subrayó el "incuestionable" derecho de su país a edificar en Jerusalén Este, que ocupa desde la Guerra de los Seis Días de 1967, en alusión al proyecto de construcción que ha generado las protestas.