Cristiano Ronaldo barruntaba día grande en la previa del encuentro. Partido de infarto y con el honor en juego, uno de esos en los que el luso dice sentirse cómodo. No le dio tiempo a demostrarlo. El madridista no aguantó ni media hora en el terreno de juego, un tobillo lastimado dejaba a sus compañeros solos ante el peligro.

Cuando se fue del campo su equipo ya iba por delante en el marcador. Simao había abierto la lata en el minuto 20 aprovechando un balón que se había dejado por el camino el portero magiar precisamente tras un centro de Cristiano. En la segunda parte, Liedson aumentó la ventaja y Simao rubricó la victoria con una volea fabulosa (3-0).

Una victoria de los de Queiroz ante Malta les asegura la repesca

Portugal supo convertir la necesidad en hambre. Cuando sólo vale ganar, algunos echan mano del miedo, pero lo inteligente es sacar fuerzas y dar un golpe de autoridad en la mesa. Así lo hicieron los lusos, que salieron feroces y amilanaron a Hungría, que también aspiraba a la segunda plaza que da acceso a la respesca.

La primera posición había quedado clara minutos antes. Un gol danés negaba la clasificación directa a Portugal, pero lo que en otro momento hubiese sido dolor ayer sonaba a liberación. Suecia se había convertido en la rival para la repesca y con su derrota(1-0) dejaba vía libre a Portugal.

Desde ayer los lusos y los daneses son amigos para siempre o, al menos, hasta que vuelvan a encontrarse. El fútbol es caprichoso para estas cosas. Dinamarca no necesitaba la victoria, el empate le hubiese servido para sus intereses, pero luchó hasta el final echando así una mano a los lusos, que supieron aprovechar el regalo. Con una victoria ante Malta en casa el miércoles, Cristiano estará en el Mundial.

Serbia, Alemia e Italia sellan su presencia en el Mundial

El resto de grupos también tocan a su final. De los nueve grupos hay siete decididos y el de Suiza, salvo cataclismo, terminará con los helvéticos en el Mundial. El único en el que todo está por decidir es el de Eslovaquia y Eslovenia, que se jugarán en la última jornada el orden final del grupo. Los eslovacos, que juegan en Polonia la última jornada, son líderes a sólo dos puntos de los balcánicos, que visitarán San Marino.

Italia sufrió como sólo los transalpinos saben para meterse en el Mundial. El equipo de Lippi no parece soñar con victorias holgadas ni cosas fáciles. Ayer, un empate le era suficiente, pero conseguirlo sin dolor no entraba en el plan. Irlanda se adelantó en dos ocasiones, la última de ellas en el minuto 87, pero Gilardino se apareció en el último minuto para ayudar a los italianos a dormir mejor. 2-2 y acceso al bombo.

Alemania, que tenía una empresa difícil en Rusia, no dudó. Klose marcó antes del descanso y Adler, el portero, salvó a los teutones de sufrir un partido más. Serbia, por su parte, fue contundente, le metió cinco a Rumanía y condenó a Francia al purgatorio de la repesca, como, Rusia, Ucrania, Bosnia, Irlanda y, posiblemente, Portugal.