La prohibición que la Iglesia Católicahace del uso de anticonceptivos no es la culpable del boompoblacional que está a punto de hacer que el planeta supere lamarca de los 7.000 millones de habitantes, dado que la mayoríade los católicos hacen caso omiso de ese veto, dijo elmiércoles el Fondo de Población de la ONU (UNFPA, por su siglaen inglés).

"En países católicos como Italia, España o Malta, la gentesigue usando anticonceptivos como condones, así que laprohibición de la Iglesia no está teniendo ningún impacto",dijo Safiye Cagar, director de Información y RelacionesExternas en UNFPA, en una comparecencia de prensa.

"Además, el crecimiento de la población en los paísescatólicos es limitado, comparado con otras partes del mundo",dijo Cagar.

Un 98 por ciento de las mujeres católicas sexualmenteactivas han usado métodos anticonceptivos prohibidos por laIglesia, según un reciente informe del Instituto Guttmacher,una organización de investigación de la salud sexual sin finesde lucro.

La ONU espera que la población mundial alcance los 7.000millones de habitantes el 31 de octubre, y los recursosmundiales están quedando pequeños para cumplir la crecientedemanda.

El organismo prevé que la población mundial llegue a 9.300millones en el 2050 y a 10.100 millones en el 2100.

Buena parte del crecimiento provendrá de Africa, donde lapoblación crece a un ritmo del 2,3 por ciento anual, más deldoble del 1 por ciento que crece en Asia.

Si este ritmo continúa, lo que no es seguro, la poblaciónafricana se triplicará con creces, hasta 3.600 millones, parael 2100 desde los 1.000 millones actuales.